Messi y Dybala, un duelo al gol en el Camp Nou

Messi y Dybala, en el Juventus - Barcelona del año pasado

Messi y Dybala, en el Juventus - Barcelona del año pasado / sport

Javier Giraldo

Javier Giraldo

Paulo Dybala no tuerce el gesto ni baja la mirada cuando los periodistas le preguntan si se considera el heredero de Leo Messi. Nada asusta a Dybala, el chico que desembarcó en el Palermo a los 18 años para jugar en la Serie B, poco después de perder a su padre, y que hoy es el jugador franquicia de la Juventus y uno de los elegidos para suceder a Messi en el trono del fútbol.

Ambos se enfrentan esta noche en el regreso de la Champions.  Ambos llegan al partido desde una posición privilegiada: líderes y máximos anotadores en sus ligas, la española y la italiana, con cinco tantos en tres jornadas. 

El Barça-Juve, un partido con aroma a final de Champions, reúne en el Camp Nou a dos talentos descomunales que ya juegan juntos en la selección argentina y que sin embargo, brillan más con sus clubes que en el combinado nacional

Hay motivos más que suficientes para situar a Dybala en la nómina de aspirantes al Balón de Oro en un futuro no muy lejano: detrás de Messi y de Cristiano aparecen futbolistas de impacto como Dybala, futbolista decisivo, hecho a sí mismo y capaz de resolver un partido o incluso una eliminatoria en un detalle. Lo sabe bien el Barça, que lo sufrió el año pasado. Dos goles de Dybala empezaron a cavar la tumba del equipo blaugrana.

un duelo, una revancha

De aquel duelo entre Barça y Juventus, Dybala salió ganador frente a un Messi que ni siquiera pudo ver puerta: cinco meses después, la Champions los vuelve a enfrentar. El partido servirá para comprobar lo cerca o lejos que está Dybala de situarse en el podio del mundo del fútbol. Siguen mandando Messi y Cristiano, pero el ‘10’ de la Juventus llama con fuerza a la puerta. 

Elogios a leo A sus 23 años, ya es el ídolo de la afición de la Juventus. Pero Dybala sabe cómo funcionan los resortes del fútbol y en cuanto tiene la oportunidad, se rinde en elogios a Messi.

el 10, mucho más que un número

Aunque el fútbol viva un imparable proceso de modernización, hay liturgias que se mantienen fieles a la tradición. Una de ellas es el peso simbólico de los dorsales: ninguno como el ‘10’, que adquiere categoría de leyenda en clubes como el Barça o la Juventus. Maradona, Romario, Rivaldo o Ronaldinho lo lucieron antes que Messi en el equipo blaugrana. En Turín brillaron Platini, Baggio o Del Piero antes de que Dybala heredase el ‘10’ en verano, un gesto que significó mucho más que un cambio de número

Fue toda una declaración de intenciones, una especie de coronación para un futbolista llamado a heredar el cetro de Messi y de Cristiano Ronaldo. Dybala es de la misma quinta que Neymar y solo él parece reunir las condiciones necesarias para pelear con el brasileño en el fútbol del futuro, con permiso de Mbappé, Dembélé, Asensio y otros recién llegados. 

un pasado vacío en argentina

El presente y el futuro de la selección argentina viven unidos por un hilo invisible: ambos llegaron muy jóvenes a Europa, sin haber llegado a la primera división de su país. Messi era un crío cuando jugó en las inferiores de Newell’s y Dybala jugó en Instituto de Córdoba, pero en la Primera B. Ni uno ni otro tuvieron tiempo de enamorar a la hinchada de su país antes de dar el salto a Europa y ahora asumen la responsabilidad de llevar a Argentina al Mundial.