Gündogan ya deslumbra al vestuario

"Tengo muchas ganas de empezar a jugar con Pedri”, declaró Ilkay Gündogan en sus primeros días como futbolista del FCBarcelona. Sin ningún tapujo, el centrocampista alemán reconoció que uno de sus objetivos en su nueva etapa profesional era forjar una buena conexión el “talentoso” interior canario.

Xavi: "Hemos fichado a Gündogan para dar estos pases"

Este domingo, en su segundo compromiso oficial con la camiseta azulgrana tras dejar atrás la zona de confort de Manchester, el teutón asistió al tinerfeño en el tanto que allanó el camino hacia la primera victoria de la temporada. Y demostró que, con su incorporación, el proyecto de Xavi Hernández ha sumado a un efectivo diferencial en los últimos metros.

Sus compañeros ya alucinan como explicó su aliado en gol que desatascó el encuentro. "Es un fuera de siempre, siempre intento desmarcarme cuando tiene el balón porque lee muy bien el juego. Me dio un gran pase y me pude tirara para marcar", explicó Pedri.

Comprende a Xavi

En un sentido parecido, Xavi recalcó que "hemos fichado a Gündogan para que nos pueda dar estos pases". El ex del City, además, entendió lo que quería el míster: tener paciencia, hacer circular el balón y esperar el momento justo para dar la asistencia definitiva.

Más allá del pase de gol, Gündogan completó una buena actuación ante el Cádiz. Como dijo Ancelotti con Bellingham, el FC Barcelona todavía tiene que acostumbrarse a sus virtudes y a su calidad. Aun así, el alemán, como el británico, es uno de esos jugadores que necesita hacer muy poca cosa para dejar huella rápidamente. Así ha sido.

Margen de mejora

Ilkay asumió un rol trascendental en la construcción de juego culé. Acabó el encuentro con 114 intervenciones, 89 pases con un 93 por ciento de acierto (tres de ellos clave), completó tres centros y un balón en largo y generó una ocasión clara de gol. El Barça aún requiere que su versión llegadora desde segunda línea se note en términos anotadores, pero es cuestión de poco tiempo. Si algo ha demostrado el teutón en los últimos años (no se fue del City hasta que se reconcilió con la Champions League y levantó el trofeo que tanto deseaba), es que se autoexige como nadie.

Un jugador con su mentalidad ganadora y competitiva es vital para cualquier equipo que aspira a defender el título de Liga y dar un paso adelante en Europa, esa asignatura que tanto se ha resistido en las últimas temporadas.