Las carencias que frustran a Koeman en el Barça

El guion fue el esperado. Incluso lo comentó el 'Cholo' Simeone en rueda de prensa tras el partido: "El Barça ha tenido igual o más posesión que siempre contra nosotros. En eso, poco han cambiado las cosas. Pero claro, antes tenía un tal Messi que era capaz de cambiarte el guion del partido". Efectivamente, el conjunto culé tuvo el control y jugó más en campo contrario que en el propio, pero en ningún momento logró traducir eso en peligro y en inquietud para su rival.

Koeman, que vivió el partido desde un palco privado al lado de Jordi Cruyff y uno de los analistas de la primera plantilla, se desesperaba mientras veía a su equipo cometer infinitud de errores a la hora de defender hacia atrás. Él personificó esa sangría en la figura de Nico en rueda de prensa ("en el segundo gol no sigue la marca y eso deja un espacio muy grande"), pero lo cierto es que la primera mitad fue sonrojante a nivel de colocación defensiva. Piqué salió en la foto de los dos goles (pudieron ser tres si Suárez no hubiese fallado un mano a mano clarísimo) y la sensación era de descontrol.

UNA SERIE DE INQUIETANTES SÍNTOMAS

Vamos a intentar diseccionar los principales errores y carencias de un Barça que no es capaz de reaccionar con el paso de las jornadas. Más bien todo lo contrario.

1. Como decíamos, una falta de coordinación y de 'gobierno' a nivel táctico flagrante. Más allá de que sí, el centro del campo ayer no era el más rápido de la historia (Nico y Busquets, básicamente), lo cierto es que en tres acciones del primer tiempo triangulaciones rápidas del Atlético lograron coger desprevenida a la defensa azulgrana. Piqué descolgado, corriendo hacia atrás (más allá de que no esté en forma, defendiendo con espacios es cuando más queda en evidencia) y la línea de cuatro muy separada y sin que puedan llegar coberturas. Esa fue la clave que el cuadro colchonero supo localizar y explotar.
2. Falta muchísima claridad en 3/4 de campo. Esa que daba Messi, sí, pero que por calidad y por el coste de su fichaje podría hacer Coutinho. Seguimos sin ver un leve síntoma de mejoría en el brasileño, que ayer, además, falló una clarísima. El único que parecía tenerlo claro y jugar con sentido y garra fue Gavi. Tremendo descubrimiento y crecimiento el suyo, pero obviamente no se puede cargar el peso ofensivo en un chico que acaba de cumplir los 17.
3. 'Punch'. Memphis ha perdido el 'duende' de sus primeros partidos. Lucha, pero es una isla, está muy solo y ante defensas tan ordenadas y con el oficio de la del Atleti es casi imposible que rasque nada por su cuenta. Tampoco aporta goles la segunda línea (ni De Jong, ni el propio Coutinho, ni Pedri cuando está...), por lo que el peligro casi se reduce a las incorporaciones de los centrales a balón parado.
4. Las bandas. Cierto que Dest estuvo muy bien ante el Levante en el lateral zurdo y que Mingueza se incorporó con sentido y aportando, pero ante rivales de entidad y con el físico y el orden del Atlético el equipo fue incapaz prácticamente de generar nada buscando la profundidad en los costados. Ayer los laterales tuvieron que estar muy pendientes de las ayudas y con un ojo atrás porque las contras eran letales. No hay una figura de extremo puro y con desborde en parado y el equipo lo echa mucho de menos (solo Dembélé cumple ese perfil). Solo Gavi es capaz de dinamizar un poco los ataques.
5. El fondo de armario. El arma en el banquillo de Koeman fue De Jong. El atacante holandés está muy lejos de poder sacar petróleo ante una línea de centrales de entidad. Ansu va poco a poco y es un error gravísimo exigirle o esperar algo de él después de 10 meses parado. Poco a poco irá recuperando chispa. Su equipo lo necesita como el comer. Por lo demás, muy pocos revulsivos ni perfiles capaces de cambiar un poco el guion.