Cuadrado, pendiente de Alves

El mercado sigue apretando las tuercas al Barça. La esperada remodelación de la plantilla blaugrana va lenta y todavía presenta incógnitas preocupantes. Una de ellas es desvelar quién ocupará la plaza de lateral derecho con Luis Enrique en el banquillo. La voluntad de la dirección deportiva estaba muy clara desde hace varios meses: facilitar la salida negociada de Dani Alves y dar entrada al colombiano Juan Guillermo Cuadrado. El movimiento está diseñado desde principios de año con el beneplácito de todas las partes implicadas.

La operación se encuentra muy cerca de ser abortada. Según las últimas informaciones aparecidas en la prensa francesa, el PSG habría dado marcha atrás en su idea de contratar a Dani Alves una vez finalizado el Mundial de Brasil. Un severo revés que dejaría al brasileño sin novias entre los grandes clubs europeos y con un año más de contrato por cumplir como futbolista del FC Barcelona.

El engranaje planificado quedaría seriamente tocado y cuestionaría la necesidad de afrontar la fuerte inversión económica que exige la Fiorentina para desprenderse del polivalente internacional colombiano. Si Alves no sale de la plantilla y aporta un ingreso económico, parece complicado que Cuadrado recale en el Camp Nou.

'LE PARISIEN'

La puntilla ha llegado de la mano del rotativo ‘Le Parisien’. El diario francés señaló tener confirmado que el PSG declinaba la opción de firmar a Dani Alves. La noticia, en primera instancia, llegó con sus respectivos argumentos. Según los informes técnicos analizados, el club parisino no ve claro la posibilidad de amortizar el precio del traspaso al Barcelona –estimado en una cifra aproximada a los 10 millones de euros– con un futbolista de 31 años. Además, el brasileño habría exigido una ficha astronómica en su aventura francesa. Dos circunstancias que habrían aconsejado reconsiderar el recambio para potenciar la banda derecha del PSG. Laurent Blanc insiste en la firma de un lateral derecho tras el irregular rendimiento ofrecido por Jallet y Van der Wiel.

Pero la información recogida en ‘Le Parisien’ se complementa con el nombre del futbolista escogido como alternativa más real. Se trata de Ignazio Abate. El lateral internacional italiano de 27 años milita en el Milan y llegaría de la mano del controvertido agente Mino Raiola. El representante de Zlatan Ibrahimovic, entre otros. Esta operación ya estaría en marcha, el coste económico sería muy similar y el Milan daría todas las facilidades en un intento de sanear su maltrecha economía.

El nuevo contratiempo a la planificación deportiva coincide con las recientes declaraciones de Alves recordando que tiene un año más de contrato en el Barça, que está ilusionado con el proyecto blaugrana de futuro y que recomienda el fichaje de Cuadrado en un intento por potenciar el nivel de la plantilla culé. “Si lo pueden contratar, animo al Barça a hacerlo. Los grandes jugadores siempre son bienvenidos. Si viene, sería una motivación y un desafío para mí. Los dos lucharíamos por ser titulares”. Sin duda, no se trata del clásico mensaje del jugador que ha iniciado la cuenta atrás antes de abordar un cambio de club.

ALTERNATIVAS

El mercado se mueve cansino y los grandes clubs están aplazando sus operaciones. La dirección deportiva blaugrana confía en que nada se haya roto y, en el peor de los casos, se presenten nuevas alternativas que permitan seguir con los planes de futuro trazados. Sin embargo, las opciones reales que siempre ha manejado Alves son escasas y apenas si abarcan cinco o seis clubs. En la mayoría de casos, la disponibilidad a invertir en la contratación de un lateral derecho es casi nula.

El dilema está servido y obliga adoptar decisiones complicadas. Si Dani no encuentra acomodo en el mercado –solo se moverá a un equipo de Champions League, ambicioso y que respete su actual ficha–, al Barça no le quedará más remedio que llegar al último año de contrato y ver cómo se evapora las opciones de ingresar un traspaso que se daba por descontado hace semanas. Además, por muy polivalente que sea Cuadrado, falta por saber si se mantendría en pie la necesidad de incorporar a un banda derecha. Por ahora, en el club se impone la calma a la espera de acontecimientos.