Xavi asume que es la hora del entrenador

El Barça suma dos partidos consecutivos con un juego más que deficiente. Victoria agónica en Anoeta ante la Real Sociedad y derrota inesperada en Hamburgo contra el Shakhtar. Dos partidos con diferente resultado, pero con un fútbol a años del que debe hacer un equipo como el azulgrana.

Oportunidad perdida con otro partido preocupante

Xavi, entre triste y enfadado o ambas cosas, decía en la sala de prensa del Volksparkstadion que ve un claro problema de bloqueo mental en el equipo. Es por ello, que desde el cuerpo técnico ven esta vez positivo el próximo parón de selecciones. La consigna ahora es clara. Ganar al Alavés este domingo, mejor si es jugando bien, y aprovechar el parón para que los jugadores cambien de ambiente y vuelvan con otra mentalidad para afrontar lo que quedará hasta final de año, debiendo certificar la clasificación para octavos que se dejó escapar en Alemania, y afrontando importantes encuentros en la Liga ante Girona, Atlético de Madrid o Valencia.

Irá bien el parón para que la plantilla haga ese 'reset' que decía Xavi que necesitan, pero también para que el cuerpo técnico busque soluciones al bajón que ha hecho el juego del equipo. "Es el momento del entrenador y el cuerpo técnico", decía también el egarense en Hamburgo y así lo piensa.

Xavi encontró la pasada semana la fórmula del cuarto centrocampista y con ella el Barça ganó la Liga con autoridad. En este parón trabajará con sus ayudantes para encontrar una nueva fórmula que cambie la dinámica del equipo en el terreno de juego. Debe convencer a sus hombres, y así lo hará, para que sean más ambiciosos y para que la presión sea mejor y más efectiva.

Atacar y defender mejor

Son conscientes de que el equipo debe atacar mejor. Porque crearán más peligro y también porque el equipo estará mejor colocado para empezar a defender cuando pierda el balón. En ataque deben abrir mejor el campo y tener más hombres entre líneas, pues muchas veces hasta cinco hombres de ataque se colocan a la misma altura en el campo, siendo más fácil para el rival defender.

Y también pensarán en si el Barça debe seguir defendiendo solo con dos centrales o debe cerrar con tres jugadores para no recibir tantas ocasiones claras de gol. La pasada temporada, con Koundé, Araujo y Christensen, el equipo fue el menos goleado de la Liga. Este curso, con dos laterales largos como Cancelo y Balde, los rivales encuentran muchos más espacios. Encontrar el encaje de Cancelo con Balde también es uno de los deberes para este bendito parón.