El Barça decidirá cuatro renovaciones clave en febrero

Febrero será el mes de las grandes decisiones sobre los jugadores que acaban contrato en el Barça. El club blaugrana ha seguido de forma estricta su planificación cerrando continuidades estratégicas como la de Balde o renovando a Iñaki Peña y Marcos Alonso y en las próximas semanas afrontará el futuro de Sergi Roberto, Busquets y Bellerín más el blindaje de Dembélé. Los dos capitanes tienen opciones de seguir mientras que el lateral tiene pie y medio fuera del club. El blindaje de Dembélé completaría el abanico de negociaciones.

El área deportiva ha ido concretando las prioridades, por lo que el año pasado ya firmó la cotinuidad de Gavi y Araujo aunque sus contratos no han podido ser inscritos por ahora. En las últimas semanas, el director de fútbol, Mateu Alemany, se ha encargado de negociar la renovación de Balde e Iñaki Peña y hoy mismo también podría tener oficialidad la renovación de Marcos Alonso. Una vez cerrado el mercado de fichajes de enero, el área deportiva hablará con los otros futbolistas que acaban contrato.

El caso más especial es el de Sergio Busquets. El Barça apostará por su continuidad por una temporada siempre que económicamente sea viable. El capitán debería rebajarse mucho el salario para que su renovación sea viable y será él quien tome la decisión. Todo está abierto aunque el club le dará la opción de continuar.

Más debate genera Sergi Roberto. Xavi Hernández es partidario de renovarle por un año más replicando su mismo salario bajo para que entre dentro del límite salarial. Cree que su polivalencia puede ser aprovechable al igual que su experiencia dentro del vestuario. El futbolista está por la labor, pero en el club hay dudas sobre si se debe cerrar ya su ciclo como blaugrana. Quien tiene su futuro más claro es Bellerín. Fichó como complemento para el lateral diestro pero casi no ha jugado y saldrá en junio.

El Barça también quiere iniciar las negociaciones de blindaje de Dembélé, quien termina contrato a 30 de junio. Lo hará con calma, pero con la intención de ampliar su contrato más allá del 2024 llegando a un buen acuerdo para todas las partes. El francés desea seguir y habrá que encontrar una fórmula cómoda para evitar que entre en su último año de contrato sin renovar y pueda irse libre.