La plaga de lesiones se ceba ahora con el Real Madrid

Cuando todo va mal...siempre es susceptible de ir a peor. Es lo que le sucede en este primer tramo de la temporada al Real Madrid, afectado por una plaga de lesiones e inmerso en una espiral negativa de resultados. Un factor, este último, que se visualizó con la durísima derrota europea en la pista del Baskonia.

Pero ese encuentro, al margen del varapalo deportivo, dejó una secuela en forma de nueva lesión. Este miércoles, los servicios médicos del club blanco anunciaron que Anthony Randolph sería baja por un período indeterminado (se habla de cinco o seis semanas) a causa de una lesión por estrés en la base del tercer metatarsiano del pie derecho.Este es el segundo contratiempo del ala-pívot estadounidense que ya estuvo dos semanas de baja por una luxación en el hombro.

Esta es la penúltima contingencia en este capítulo de problemas de lesiones que se inició en verano cuando Sergio Llul, en un partido amistoso de la selección, sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha. Un percance que tendrá aún varios meses de baja al balear. Su baja de larga duración propició la contratación de Chasson Randle.

Luego, en el duelo ante el CSKA de Euroliga, amén de la ya comentada lesión de Randolph acaeció otro grave contratiempo:el de Ognjen Kuzmic. El pívot padeció una rotura completa del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda que le dejó KO para lo que resta de temporada. 

Por último, antes de este nueva mala noticia de Randolph, el equipo de Pablo Laso sufrió la baja de Gustavo Ayón con una lesión en el borde inferior del labrum del hombro izquierdo. Dos contratiempos en el juego interior que obligaron a un segundo movimiento en el mercado; la contratación del pívot caboverdiano Walter Tavares. Y hasta hoy.

El Barça ya lo vivió

Una epidemia de bajas, que con los condicionantes correspondientes, recuerdan a la vivida por el Barça Lassa la pasada temporada donde la mayoría de la plantilla se vio afectada por percances físicos. Empezando por el de Shane Lawal en los Juegos de Río, siguiendo por el de Pau Ribas en Belgrado, y lesiones de otros jugadores y acabando por el de Víctor Claver en el último partido de la temporada en la pista del Valencia y que obligaron a numerosos cambios en la plantilla. Por lo visto, el 'virus' de las lesiones ha tomado ahora el puente aéreo.