El 2023 apunta al mejor Barça

El Barça de Saras Jasikevicius no pudo tener mejor inicio del 2023. Una victoria convincente en la pista del máximo rival, el Madrid de Chus Mateo (78-87) que le llevó al liderato compartido de la Liga Endesa y la plaza para la Copa, es la mejor manera de encarar los meses que vienen por delante, especialmente con el ojo en la próxima Copa en Badalona.

Un Barça que mostró la solidez necesaria para hacer frente a un Madrid que llegaba convencido de sus opciones con Tavares como principal arma, pero que tuvo que bajar la cabeza ante el conjunto azulgrana, superior en el momento clave del partido.

Sin duda, un 2023 que promete emociones fuertes para este equipo, diseñado para ganar todas las competiciones, pero que no ha respondido a las expectativas, especialmente en 2022. ¿Veremos la mejor versión del Barça este nuevo año? De momento, la ilusión es total.

Un equipo con recursos

El Barça ha mostrado tener las piezas necesarias para responder a cada reto que se le presente, y no depender únicamente de Nikola Mirotic. Saras realizó una apuesta clara por Da Silva, y especialmente Cory Higgins en el último cuarto del partido y la jugada le salió más que bien. No aportó Abrines, y fueron descartados Kuric y Tobey, pero son jugadores que a su vuelta al equipo pueden aportar minutos de calidad. Y eso confirma al Barça como uno de los equipos más completos de Europa.

Saras, un poco más paciente

El técnico azulgrana ha aprendido cosas del año pasado y entre otras, tratar de controlar un poco su carácter compulsivo, que vive el partido como cualquier jugador o más y le juega una mala pasada con los árbitros. Es cierto que ante Estrella Roja acabó expulsado, pero en un partido de la tensión del Madrid, supo jugar sus cartas en la banda, incluso con paciencia con sus jugadores como confesó con el propio Higgins, que estuvo a punto de cambiar antes de que empezara el recital de 14 puntos en el cuarto.

La dirección debe seguir sólida

Si de algo puede presumir este Barça es de tener tres bases de altísima calidad, de lo mejorcito que puedes tener para dirigir a un equipo top. Para el éxito de este Barça, Satoransky debe dar ese paso al frente que ha mostrado en algunos partidos. Su capacidad atlética supera a cualquier rival en su posición y solo le falta ese punto de determinación. Precisamente eso es lo que tiene Laprovittola, que ha dado un salto de gigante y parece el base más fiable ahora mismo. Ante el Madrid, 19 puntos y anotando en momentos complicados. Que siga así. El que debe dar un paso al frente es Jokubaitis que ante las buenas actuaciones de sus compañeros ha perdido minutos y confianza. Hay que recuperarle.

Tiradores de primer nivel

Este Barça tiene como distinción la gran defensa, pero a la hora de anotar, al equipo se le caen los puntos de las manos. Si no es Mirotic, el líder indiscutible del equipo, tienen que estar a punto jugadores como Kyle Kuric, Alex Abrines y por supuesto, Cory Higgins, que ya mostró en Belgrado y Madrid estar preparado para grandes retos. Jugadores capaces de anotar en cualquier circunstancia. No siempre será posible minutos para todos, pero los que logren entrar en la rotación, han de aportar. De lo contrario, habrá otro esperando su oportunidad.

El juego interior, con diversas opciones

La aportación de Sanli, sacando de la zona a los pívots blancos, especialmente fue determinante en el Clásico y las críticas que a veces recibe dentro de la zona, las solventa desde larga distancia. La llegada de Vesely aporta intimidación al equipo, puntos en la zona, y lucha por los balones, como hizo ante los blancos. Nnaji está en proceso de formación pero puede ser un añadido importante. Al igual que el alemán Da Silva, que mostró su capacidad reboteadora y anotadora. Un diamante en bruto al que se puede pulir para acabar siendo una pieza clave. Entre los ‘4’ poco se puede decir de Mirotic, capaz de hacer todo, y sin olvidarse de un Nikola Kalinic que cada día gana más confianza para ser el tipo de jugador imprescindible por todos los aspectos que aporta