La única salvación para Nadal

La lesión que sufrió Rafa Nadal en el Open de Australia en el psoas de su pierna izquierda le ha obligado a tener que parar para lo que resta ya de año. Un 2023 que quedará para el olvido y que lo puede cerrar más allá del puesto 630 del ranking ATP.

Pese a acabar en el fondo del ranking, Nadal podrá competir sin problemas a su vuelta de la lesión. La ATP dispone del llamado ranking protegido, una norma por la cual un jugador que se encuentra lesionado y no participa en ningún torneo dentro de un mínimo de 6 meses, puede solicitar que se le proteja el ranking dentro de los 6 meses posteriores a su último torneo.

El ranking protegido se determina a través de la posición media del ranking ATP durante los primeros 3 meses de la lesión. Estará en efecto para los primeros nueve torneos en que el jugador compita usando el ranking protegido o por el período de nueve meses, comenzando con el primer torneo en que participe el jugador, lo que ocurra primero.

Las 'wild cards', otra vía

Otra opción para Nadal es la de recibir invitaciones, que seguro que no le van a faltar, porque todos los torneos van a querer tener a Nadal en el que puede ser el último año de su carrera deportiva.

Eso sí, sin embargo esto tiene una contrapartida y es que no permite entrar en los torneos como cabeza de serie. Es decir, aunque el ranking de Nadal sea el tres, por ejemplo, no entrará a los torneos como tercer cabeza de serie.