Clara Chía pierde de nuevo en los juzgados

Clara Chía lleva en boca de todos desde que se hizo pública su relación con Gerard Piqué y es que la joven no se encuentra a gusto con la explosión mediática que ha experimentado su vida en los últimos años sobre todo a raíz de la canción de Shakira con Bizarrap con la que se rompieron los registros en todas las plataformas.

Lo cierto es que un ejército de paparazzi siguen al pie de la letra cada paso que la joven pareja da. Y es que a Clara Chía siempre ha sido tachada como la tercera en discordia y poco menos que la culpable de la ruptura.

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Conociendo las circunstancias en las que se encuentran, la pareja interpuso, el día 10 de mayo, una querella contra el fotógrafo Jordi Martín por acoso. En junio ganaron el juicio y lograron una orden de alejamiento de mil metros. Y es que, lo que pintaba muy bien, se ha terminado torciendo.

Tres meses después, Clara Chía buscaba que esta medida fuera prorrogada, pero el juez dictaminó que no había motivos para volver a concedérsela, ya que Jordi habría cumplido con las restricciones anteriormente impuestas. Además, su situación con la prensa habría mejorado notablemente.

A pesar de esto, la novia de Piqué no se ha dado por vencida, y es por esto que el pasado miércoles; el periodista fue retenido a petición de ella. Al parecer, Jordi, que volvía de su trabajo desde Miami, se encontraba tomando algo cerca de las oficinas de Kosmos, cuando se presentaron tres patrullas de los Mossos d'Esquadra.

Según han informado varios periodistas que acudieron al lugar de los hechos, los agentes detuvieron a Jordi durante aproximadamente una hora, ya que la catalana se encontraba "muy alterada" por enterarse que estaba allí.

Desde su entorno cercano sostienen que lo sucedido no tiene gran importancia. Las amigas de Clara Chía desconocen el suceso y el propio Piqué estuvo de fiesta ese mismo día con Riqui Puig, algo que demuestra "que no hubo tantos nervios como denunciaron".

"Por dos veces la justicia le ha dicho que no existen motivos para dictar una orden de alejamiento contra mí. Ahora soy yo el que estoy sopesando la posibilidad de interponer una querella por acoso, por impedirme hacer mi trabajo y por lucro cesante.", sentenciaba Jordi Martín al ser preguntado sobre los acontecimientos.