Neymar: Obligados a vender

Calma tensa en la ciudad de Santos: el director de fútbol del Barcelona, Raül Sanllehí, y los representantes brasileños del club blaugrana, André Cury y Marquinhos Malaquías, esperaban al cierre de esta edición una llamada del presidente en funciones del Santos FC, Odilio Rodrigues, para proseguir las negociaciones por el fichaje de Neymar da Silva.

La estrategia del Barça, de momento, está dando sus frutos. La primera propuesta presentada al club brasileño fue toda una declaración de intenciones: 17 millones de euros, a repartir entre las tres partes que detienen los derechos económicos del jugador, el propio Santos (55 por ciento), el grupo DIS (40 por ciento) y el grupo TEISA (5 por ciento).

El FC Barcelona ha apretado muy fuerte desde la línea de salida, consciente que la entidad paulista se encuentra en un callejón sin salida: o acepta los términos de la negociación, o el Barça se esperará hasta el mes de enero para firmar un precontrato con el jugador y, consecuentemente, el Santos no verá ni un céntimo por su traspaso.

El escenario de que la 'Joya' cumpla su actual vínculo contractual y salga libre fue descartado por el Comité de Gestión del Santos, que reúne cada miércoles a directivos y a altos ejecutivos de empresas que asesoran al club del 'peixe'.

De puertas hacia fuera, algunos directivos santistas aún sacan pecho y hablan de cifras desorbitantes, como si a Neymar le quedasen todavía dos o tres años de contrato por delante, pero quien decide en el club tiene perfectamente interiorizada su condición de inferioridad con respecto a los responsables del Barça.

El clima entre ambas partes es de máxima cordialidad, ya que desde 2011 se mantienen contactos. Por mucho que exista un entorno favorable, alimentado también por la estrecha y permanente colaboración entre el Santos y el jugador, el Barça no va a ablandarse, ni renunciará a sus planteamientos estratégicos.

Ya ha hecho saber que no cometerá ninguna locura por un jugador que podría llegar libre el próximo verano. Además, el Santos ya ha escuchado de boca del padre del jugador que su hijo quiere salir ahora con destino Barcelona y que rechazará cualquier propuesta que reciba, lo que bloquea, en la práctica, su posible traspaso al Real Madrid.

Calculadora en mano, la lógica negociadora blaugrana se fundamenta en la siguiente cuenta: si tres años atrás el Santos le puso a su estrella una cláusula de rescisión de 65 millones de euros, pasadas dos temporadas y a una solo de la finalización del contrato, el precio justo es un tercio del valor inicial, o sea 21,6 millones de euros.

El hecho de que el Santos no haya roto las negociaciones con el primer valor presentado por el propio Sandro Rosell a Odilio Rodrigues, en los contactos que tuvieron lugar en Madrid el fin de semana pasado, escenifica su postura de debilidad.

En el momento en el que Neymar padre rechazó este año la propuesta de renovación que le presentó el Santos hasta verano de 2016, justo cuando terminen los Juegos Olímpicos de Río, al club paulista se le complicó la permanencia de su enseña. Las posibilidad de organizar una subasta y vender al futbolista al mejor postor se disipó con la postura tomada por 'Ney'. Hay optimismo entre los negociadores barcelonistas. Todo va por el buen camino.