Curioso lo que va a suceder en el Maratón de Boston del próximo 17 de abril. Entra dentro de esa idiosincrasia tan peculiar que tiene un país federal como Estados Unidos. No se podrá apostar por la victoria de Kipchoge (o por la de cualquier otro atleta participante) en Boston, la ciudad donde se celebra la prueba, pero sí desde Kansas, Oregon o Wyoming. Cada vez más extendida la práctica de las apuestas deportivas, para muchos es uno de los alicientes principales de los eventos deportivos. Obviamente, en este caso el gran favorito a la victoria es el ‘Rey’, un Kipchoge que viene de lograr batir su propio Récord del Mundo en Berlín y que busca imponerse en todas las ‘Majors’, algo que ningún otro maratoniano ha conseguido.
“En este momento, no hay tiempo suficiente para que la Asociación Atlética de Boston ni sus muchos socios y agencias coordinen y garanticen completamente que se implementen los protocolos adecuados para respaldar tal propuesta para apostar en nuestro evento. Sin tiempo para someterse a un análisis y a la diligencia debida adecuada, nos preocupa cómo una aprobación tan acelerada podría afectar el evento”, aseguran los funcionarios de BAA. “Hasta que podamos completar la diligencia debida, nuestras preocupaciones incluyen, entre otras, garantizar la seguridad del evento y la posible influencia en el resultado de la carrera”.
Garantizar que no influya en los resultados
De esta forma, no se quiere que influencie el tema de las apuestas en posibles resultados. Aunque tampoco guarda mucho sentido si se puede apostar desde otros estados.
Las apuestas deportivas ahora están legalizadas en el estado de Massachusetts (Boston), pero no se podrán realizar apuestas en el maratón de Boston de 2023 . Todavía no, al menos. La Comisión de Juegos de Massachusetts rechazó por unanimidad una propuesta de la casa de apuestas ‘DraftKings’ en una reunión del jueves por la mañana para permitir que incluyera la carrera en su categoría de “eventos especiales” para apuestas.
