La crisis del Valencia sigue en punto muerto

Los aficionados dieron su apoyo a Alemany

Los aficionados dieron su apoyo a Alemany / EFE

Albert Gracia

Día de llamadas, de reuniones y de tensión en Valencia. De mucha tensión. No jugaba el equipo che pero lo que hay en juego es más importante que cualquier partido de pretemporada. El futuro del club está en juego y el valencianismo lo está viviendo con extrema preocupación. Tras la bomba que cayó el domingo sobre las desavenencias entre el director general, Mateu Alemany, y el máximo accionista, Peter Lim, en la gestión deportiva, se han producido tres reuniones con tal de salvar la situación pero lo cierto es que se mantiene la jornada de reflexión.

El día de hoy se antojaba clave para solventar los rifirrafes y confirmar la marcha o no de Alemany pero Meriton y el club prefieren tomárselo con calma. Por la mañana, Anil Murthy, el presidente, se reunió con la plantilla y Marcelino para ponerles al día de la situación que está viviendo la estructura deportiva. 

Tras conocer la opinión del vestuario, Murthy puso rumbo a la sede del club para conversar con el director general y tener la segunda reunión para tratar de desencallar un asunto que debería cerrarse lo antes posible por el bien de la planificación deportiva. Tras esa primera reunión matinal, Alemany atendió a los medios y expuso sus impresiones. No parecía demasiado contento. Normal.

“No hay aún acuerdo, estamos en ello. Estamos hablando de muchas cosas y considerando los siguientes pasos a dar pero lo fundamental es que todos queremos lo mejor para el Valencia. ¿Qué es lo mejor para el Valencia? Esto yo ya no lo sé, pero es lo que todos queremos”, dijo. El todavía director general dejaba su futuro en el aire y esperaba a una tercera reunión -la segunda de un intenso día- para poder tener ya una ‘fumata blanca’. 

Alemany quiere quedarse Pero nada más lejos de la realidad. Tras las conversaciones vespertinas, Alemany salió de las instalaciones del Valencia y no despejó la incógnita: “Yo siempre me he querido quedar aquí. Es positivo que haya diálogo y que se busquen soluciones cuando hay problemas. ¿El talante de Meriton es diferente? No, yo creo que ellos piensan igual que yo, quieren lo mejor para el Valencia”.

Mientras las dos partes intentan encontrar una solución que sea la mejor para el club, la hinchada valencianista se echó a las calles para mostrar su apoyo a la figura de Mateu Alemany y condenar las acciones de su máximo accionista. Resolver las discrepancias es básico para un Valencia que aún no ha resuelto algunos de los temas que tiene encima de la mesa. ¿Seguirá Rodrigo? ¿Llegará Rafinha? Marcelino necesita tener respuestas para planificar la temporada. El futuro del club se decide en los próximos días. Miles de ojos puestos en las oficinas ches.