La receta de Dimitrov para 'domar' a Alcaraz

El búlgaro apostó por un tenis agresivo para dejar al murciano fuera del Open de Miami

¿Cuándo juega Carlos Alcaraz su próximo partido?

DImitrov y Alcaraz se saludan tras el aprtido

DImitrov y Alcaraz se saludan tras el aprtido / LAP

Cristina Moreno

Cristina Moreno

Grigor Dimitrov se ha convertido en la gran sorpresa del Miami Open. Sin contar 'a priori' en ninguna de las quinielas, ha avanzado poco a poco, sin hacer ruido, hasta colarse en semifinales, tras ganar, ni más ni menos, que a uno de los grandes favoritos, Carlos Alcaraz.

El murciano, que apenas había tenido dificultades en sus tres primeras rondas, se topó contra un Dimitrov que saltó a pista con las ideas claras y un plan concreto para doblegar al murciano. "De Carlos yo siempre digo que es un petardo. Es explosivo, increíble. Siempre tienes que ponerle en una situación incómoda. A veces, tienes que ponerle potencia a tus golpes para mantenerle a raya. Esto es interesante especialmente en los puntos delicados. Es como jugar al gato y al ratón para ver quién es el primero que golpea", explicaba el búlgaro tras su victoria en Miami.

Y el plan no falló. Dimitrov desquició a un Alcaraz que no encontró la forma de dar la vuelta a la situación. Ni las constantes indicaciones de Juan Carlos Ferrero desde la gradas pidíéndole que se animara, que se hiciera fuerte, sirivieron para reconducir el partido. El búlgaro, al que en su juventud llegaron a comparar con el gran Roger Federer, planteó una velocida de vértigo, acorralando a Carlitos, sin hacer ni una sola concesión.

“¡Qué inútil soy!,¡No sé dónde restar!”, se lamentaba el de El Palmar. Una imagen poco habitual en él, habitualmente concentrado y con las ideas claras. El desenlace, una clara derrota (6-2, 6-4) para cerrar el camino de Alcaraz hacia el 'Double Sunshine'.

El balance se va igualando

Parece que Grigor Dimitrov le tiene tomada la medida a carlos Alcaraz. Entre ambos, hasta el duelo en Miami había cuatro precedentes, con un balance positivo para el español de 3-1. El de El Palmar ganó en el Masters 1.000 de París de 2022, en el de Madrid 2023 y en Queen's 2023. Suficiente para que Dimitrov aprendiera la lección y le devolviera el golpe el año pasado en Shanghai (5-7, 6-2, 6-4). Un duelo que marcó el principio del bajón que sufrió Carlitos al final del curso pasado.

Alcaraz y Dimitrov, el año pasado en Shanghai

Alcaraz y Dimitrov, el año pasado en Shanghai / EFE

Pese al precedente favorable, el tenista de Haskovo prefirió hacer borrón y cuenta nueva para medirse a Carlos en Miami. “Ayer por la noche estuve a punto de ver el encuentro que jugué con él en Shanghái. Estuve a ‘esto’ de darle al botón del play, pero paré. Pensé que no tenía necesidad de verlo, porque todo era diferente. Jugar en Asia, en una pista y clima distintos, todo era diferente", desveló el búlgaro que quería "llegar aquí y empezar de cero". "Básicamente, tenía que mirar a lo que yo podía hacer y hacerle daño con cada golpe en cada oportunidad que tuviera. Así lo hice. Así de simple”, zanjó.

Una estrategia que salió bien y que le acerca a la batalla por el título si Alexander Zverev, su rival en semifinales, lo permite. Sería su segundo título en un Masters 1.000 después del conseguido en 2017 en Cincinatti, el mismo año en el que se coronó como Maestro. En 2024, a sus 32 años, Grigor está viviendo una segunda juventud y apunta alto.