Tchouameni, con muletas, se aleja de Wembley

La presencia de Aurelien Tchouameni en la final de la Champions League se complica. El centrocampista francés celebró el título de Liga con sus compañeros ayudado de una muleta y con una fuerte protección en la pierna izquierda, en la que sufrió una lesión por estrés que le ha provocado un hematoma doloroso.

Se lesionó en el partido de vuelta de las semifinales de la Liga de Campeones ante el Bayern del pasado 30 de abril. Va a tener un mes para intentar superar la dolencia, pero perderá ritmo al estar todo este tiempo sin jugar, además de correr el riesgo de recaer, lo que supondría quedarse sin Eurocopa.

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Comodín para Ancelotti

Ancelotti sabe que si llega lo hará muy justo, y empieza a valorar posibilidades de sustituirlo en caso de que no pueda contar con él. Se da la circunstancia que Tchouameni estaba siendo un comodín para el italiano, al que ha utilizado en el centro de la defensa, según los rivales y las necesidades del equipo, y en la medular.

Para el italiano puede ser una doble preocupación. Por una parte, esperar que Militao entre en la línea competitiva que todavía no ha alcanzado como se pudo ver de nuevo contra el Granada, o volver a confiar en Nacho, que cumplió con creces en el encuentro contra el Bayern con un excelente rendimiento pese a las dudas que había dejado en anteriores actuaciones.

A 19 días de la final

En el centro del campo lo normal es que si Tchouameni no llega a Wembley sea Camavinga su sustituto. Es el relevo natural de su compatriota, pero sigue siendo un jugador tan explosivo e incansable como inseguro en algunas ocasiones. Su juventud, 20 años, le convierte en un futbolista sin complejos y eso a veces se vuelve contra él pese a que siempre cumple.

La otra alternativa sería recurrir al doble pivote con Valverde y Kroos, recurso que el italiano ha utilizado varias veces esta temporada con excelente resultado. Eso puede suponer una oportunidad para que Ancelotti dé entrada en la medular a Modric, que está haciendo un gran final de temporada. Todo va a depender de si Tchouameni deja o no atrás esa dolencia en su pierna izquierda en los 18 días que quedan para jugar la final ante el Borussia Dortmund.