Un Eintracht en descomposición 'desconcierta' al Madrid

Sin Kostic (a un paso de cerrar su traspaso a la Juventus) y tras perder 1-6 en un debut horroroso ante el Bayern, el cuadro germano llega con muchas dudas

A priori, el equipo de Ancelotti es muy favorito para levantar el primer título de la temporada

El Eintracht ha perdido nivel en esta nueva temporada

El Eintracht ha perdido nivel en esta nueva temporada / EFE

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El Real Madrid afronta esta noche (21:00) en Helsinki el primer título de la temporada. El cuadro de Ancelotti se mide con el Eintracht de Frankfurt en la Supercopa de Europa. A priori, el equipo blanco es favoritísimo para llevarse el triunfo frente a un conjunto germano que llega con muchísimas dudas. La venta de su gran estrella, Kostic, a la Juventus, la pérdida de de un jugador importante el curso pasado como Hintergger (retirado a los 29 años). La derrota en la jornada inaugural de la Bundesliga (1-6) ante el Bayern.

Las sensaciones del equipo que dirige Oliver Glasner no son, para nada las mejores. Este Eintracht parece lejos del equipo que maravilló en la eliminatoria de Europa League frente al Barça. Un conjunto eminentemente físico, con transiciones velocísimas y puñales en banda y arriba. "Me encuentro muy bien, tenemos muchas ganas de jugar este partido, es la recompensa por haber ganado la Europa League. Ahora podemos competir aquí, en la Supercopa. Jugar con el campeón de Europa, contra el que gano a PSG, City, Chelsea... Un equipo con mucha calidad. Queremos dar nuestra mejor versión. Así es nuestro enfoque. No tenemos miedo, tenemos muchas ganas de jugar el partido. Ya demostramos que siempre tenemos posibilidades y ese es el enfoque, queremos aprovecharlas", dijo Glasner en rueda de prensa.

LA TRAUMÁTICA PÉRDIDA DE KOSTIC

Muy delicado ha sido el asunto del carrilero zurdo serbio. Kostic fue la gran estrella del equipo la pasada campaña y Glasner aún tenía esperanzas de mantenerlo. Pero ni siquiera llegará a Helsinki a pesar de que todavía no sea oficial su tránsfer a la Juventus. Con todo y sobre todo después del sonoro traspiés del viernes en casa contra el Bayern, llega en plena descomposición.