El Bernabéu aclama a Ceballos y retrata a Ancelotti y al club

Al grito de “Ceballos quédate” transmitió a Florentino Pérez el sentir de una afición entregada al centrocampista andaluz

Zidane lo empujó a irse cedido al Arsenal y Ancelotti no lo ha tenido en la ‘nevera’ hasta que las lesiones le han obligado a utilizarlo

Ceballos es el nuevo ídolo del madridismo. La puerta de Edu Aguirre lo deja claro...

La afición del Real Madrid dejó clara su preferencia por el centrocampista y las ganas que tienen de que renueve un contrato que expira el próximo verano / CHIRINGUITO

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

La afición del Real Madrid reconoció la entrega, el trabajo y el talento de Dani Ceballos en el partido contra el Valencia.

Al grito de “Ceballos quédate” transmitió al club su sentir hacia uno de los pocos jugadores nacionales que tiene la plantilla blanca, y cuestiona el trato dado a un jugador de su talla en su sexta temporada en el equipo. Zidane nunca le dio continuidad y lo empujó a irse cedido al Arsenal dos de las seis temporadas que tenía firmadas, y Ancelotti lo ha tenido en la ‘nevera’ hasta que no le ha quedado otro remedio que ponerlo ante la escasez de efectivos por culpa de las bajas.

Ceballos ha sido prácticamente invisible en el Real Madrid desde que fichó procedente del Betis en la temporada 17-18. Apenas ha sido titular, 36 de los 160 partidos en los que ha estado en condiciones físicas de hacerlo (25,50%), aunque participó en 93, 57 salió como suplente (58,12%). Pero la estadística más ajustada que refleja la poca confianza que el técnico francés y el italiano han tenido en él son los minutos, al jugar menos de un tercio de los posibles, el 24,75 % (3.920’ sobre 15.840’ posibles). Muy poco para uno de los jugadores españoles con más talento.

ACABA EN JUNIO Y EL CLUB GUARDA SILENCIO

El centrocampista andaluz termina contrato en junio, pero el club no le ha hecho ninguna oferta de renovación en otra demostración del poco interés que tienen en que siga. Sin embargo, sus últimos partidos han deslumbrado a una afición que exige a Florentino Pérez y a Ancelotti que dejen de maginarlo, que merece ampliar su contrato y tener más visibilidad en un equipo que necesita de su presencia. “Muy emocionante porque que coreen tu nombre en el mejor estadio del mundo no es nada fácil”, decía el protagonista al final del partido, y es que, si el madridismo no habla, Ceballos seguiría en ese limbo caprichoso de directivos y entrenadores.

Ancelotti se ‘tapaba’ al final del partido con un lacónico “el tema contractual es algo que deben hablar el jugador y el club”, para escurrir el bulto sin una respuesta clara y directa que suele ser marca de la casa menos en esta ocasión: “Todo el mundo sabe lo que pienso yo, incluidos Ceballos y el club”. A pesar de todo, el club sigue a las suyas y no tiene intención de hacer un esfuerzo por un jugador que se llama Ceballos y no ‘Ceballinhos’. Si aborda su renovación será por presión popular, para evitar la bronca de un respetable que no comulga con ruedas de molino y que no perdona caprichos de entrenadores y de dirigentes.