Benzema y poco más

Benzema dio la victoria al Madrid ante el Sevilla

Alejandro Alcázar

Alejandro Alcázar

Karim Benzema se ha convertido en la referencia ofensiva del Real Madrid. El equipo blanco atravesó una crisis de identidad goleadora grave tras la salida de Cristiano Ronaldo y el francés ha ido poco a poco asumiendo ese rol para arrancar la temporada como un misil con cinco goles en cinco partidos de Liga. Un cambio de rol que le ha llevado a abandonar su viejo estilo de juego para centrarse en rematar todo lo que le llega.

“Juego para la gente que le gusta el fútbol” fue un recurso para justificar su falta de pegada como delantero centro. Huía de esa posición para dar servicio a CR7 y el portugués se encargaba de hacer el trabajo con suma efectividad. Pero Cristiano ya no está y alguien tenía que asumir esa labor. En principio se le pidió a Bale que fuera el referente, pero el galés es un jugador de banda que percute desde los laterales. Ninguno asumió ese papel hasta que llegó 2019. Benzema acabó dándose cuenta qué él era el delantero centro y que ya no le valía eso de asistir, Cristiano ya no estaba y no tenía un socio al que abrir espacios y jugar para él.

SE OLVIDA DE DEFENDER

Benzema ha pasado de ser un nueve estéril disfrazado de media punta a un delantero centro finalizador. Eso le ha vuelto algo perezoso en defensa. Ante el Sevilla no cerró el paso al medio centro rival, o la línea de pase para que no distribuyera el juego, y se escondió vigilando a los centrales desde la distancia. Su partido fue flojo por no decir lamentable, pero marcó el gol del triunfo que tapa cualquier crítica.

Benzema es ahora gol y nada más. En este año 2019 lleva marcados 24 goles: 20 en la Liga, 1 en la Champions y 3 en la Copa del Rey. Su mentalidad ha cambiado en ataque y sus compañeros le buscan para que finalice el juego. Ha marcado los mismos que Messi en este año natural, y ya se codea con los mejores arietes de la Ligue-1, Mbappé; la Premier, Kun Agüero; y la Bundesliga, Lewandowski.