Gilmour, el 'Iniesta' esocés

Albert Gracia

Ni el ‘Iniesta escocés’. Ni el nuevo Xavi. Ni el británico más ‘made in Barça’. Ni nada de las habituales barbaridades que se oyen cuando una perla empieza a destacar. Dejen de relaciones a los talentos con jugadores del pasado. Dejen que Gilmour haga su carrera. Es bueno, muy bueno. Pero esto acaba de empezar. 

El escocés ha irrumpido en Inglaterra como un volcán. El “niño pequeño” que usó Maguire para despreciarle se doctoró en la FA Cup ante el Liverpool. Y frente al Everton fue el mariscal, liderando la sala de máquinas. Gilmour es el portaestandarte de la versión mejorada y radicalizada del ‘baby Chelsea’. Porque Lampard no se casa con nadie. Jorginho estaba sancionado pero el gran nivel al que está el escocés podría condenarle. 

La historia de Gilmour en los últimos años es la de cualquier canterano que sueña con llegar. El escocés ha pasado en apenas unos meses de analizar los partidos del Chelsea a través de su ordenador, a ser importante y tener minutos en el conjunto de Lampard. Una bonita historia en la que el inglés tiene mucho que ver.

Y es que ‘Frankie’ ha sido más que un técnico para él. El verano pasado, Gilmour tenía asumido que debía marcharse, pero Lampard frenó su salida, le prometió oportunidades y el escocés las está aprovechando.  “Creo que durante el tiempo que estuvo en el campo fue el mejor. Confío en él. Entró, se movió, tocó, filtró pases entre líneas...”, confesó ‘Frankie’ tras el duelo ante el Liverpool. 

El canterano gusta, como gustó al Barça antes de que el Chelsea le convenciera. Hace jugar, controla el ritmo, no rehúye el cuerpo a cuerpo pese a su estatura (1’68), tiene 18 años… Y carácter, mucho carácter: “Si alguien es mejor que yo, yo quiero ser mejor que ellos. Odio perder”. Lampard tiene medio para años.