Del 'Kepa-radón' al 'Calamity Kepa'

La pesadilla de Kepa en una tarde aciaga ante el Liverpool

Albert Gracia

Un ‘tierra trágame’ de manual. Kepa no debe haber pasado una buena noche después de lo que sucedió el domingo, cuando regaló el segundo tanto de la tarde a Mané en una mala salida de balón. Un error que Pep Guardiola, entre otros, hubiera aplaudido como hizo en su día con Valdés o Ederson. Porque es mejor intentarlo que pegar un balonazo. Algo así hubiera dicho el de Santpedor.

En cambio Lampard fue más directo: “Ha cometido un fallo y él lo sabe”. Matizó luego sus palabras, dando el total respaldo a su guardameta. Unas palabras de cara a la galería puesto que el técnico inglés no quiere a Kepa como titular ni un minuto más. Lo ha hecho saber tanto él como el club, filtrando nombres de posibles fichajes en esa demarcación. Durante todo este mercado se ha hablado más de Edouard Mendy, que está al llegar procedente del Rennes, que del meta español. Un portero, por cierto, que es el más caro de toda la historia con esos 80 millones que el Chelsea pagó al Athletic Club.

Ahora la situación ya es insostenible. El error en Stamford Bridge ante el Liverpool ha colmado el vaso de paciencia del club ‘blue’ y de la prensa británica, que incluso se atreve a bautizar a Kepa como ‘Calamity Kepa’, comparándolo con ‘Calamity James’, un portero acostumbrado a este tipo de cantadas. Se acuerdan muy poco de que hace meses ese ‘Calamity Kepa’ era ‘Kepa-radón’. El meta vasco causó sensación cuando aterrizó en Inglaterra por sus enormes paradas y por su gran juego de pies, algo que se ha visto ensombrecido en las últimas semanas por su falta de confianza y, por lo tanto, por sus errores de infantil.

“Arrizabalaga no terminó la pasada temporada y no debería haber empezado esta”, cuentan en ‘The Times’. Se le acaba el tiempo a Kepa. Esta situación tan solo podría dar un vuelco con buenas actuaciones y parece complicado que se pueda dar. Porque es el foco mediático ahora mismo y porque Edouard Mendy llegará para ser titular ya. Todo por un error que puede salirle demasiado caro a un meta que ahora, más que nunca, se encuentra solo y hundido. 

Hubo un error anterior

El portero tiene esto. Cuando fallas, y lo haces en más de una ocasión en pocas semanas, estás en el punto de mira. Pero que nadie olvide que Christensen, cogiendo a su rival por la cintura al borde del área, fue expulsado en la primera mitad tras un error en la marca, viéndose obligado a derribarlo. Once contra once quizás hubiera sido otra cosa.