"No se le puede decir 'no' a Ari Sánchez"

Ángel González ha iniciado su proyecto con la reusense confiando en ayudarla a mantenerse en lo más alto

El técnico madrileño está muy satisfecho de los primeros meses de trabajo con su nueva pupila

Ángel González entrenador Ari Sánchezz

Ángel González, nuevo entrenador de Ari Sánchez / Instagram

Àlex Masana

Ángel González (Madrid, 1985) se refiere a él mismo como entrenador novel. Recuerda que no hace demasiado que está en la élite. Pero no le ha ido nada mal porque es el entrenador de Ari Sánchez desde hace unos meses y ya ha visto como su pupila, junto a Paula Josemaría, ha levantado dos títulos esta temporada. 

¿Cómo han ido estos primeros meses?

Las sensaciones han sido muy buenas desde el principio. Ha sido fácil porque ella se ha adaptado a mi forma de entrenar y yo me he adaptado a una número uno como ella. Me he ido adaptando a la exigencia que es trabajar con una número uno y que tiene una jugadora número uno. Hemos trabajado mucho y muy duro. Estoy muy contento.

¿Cómo fue? ¿te llama ella?

Yo vivía en Madrid y Juan Alday contacta conmigo para trabajar con él en la academia. Tenemos muy buena relación porque en todos los torneos coincidíamos en el hotel. Tomé la decisión en septiembre del año pasado de venir a vivir a Barcelona. Entonces jugadores o jugadoras me preguntaban y al final surgió la posibilidad. 

¿Surgen dudas y vértigos?

No dudé porqué no se le puede decir que no a una jugadora como Ari Sánchez, que ha sido número 1. Pero no te mentiré. Te llenas de respeto y nervios por afrontar un proyecto de tal magnitud. No dudo de mi trabajo, pero sé que voy a tener que hacer más cosas, voy a tener que informarme más, tengo que estar un poco más pendiente de todo lo que requiere este nuevo proyecto.

¿Cómo se adapta una número uno a la forma de entrenar de Ángel González?

Cada maestrillo tiene su librillo, ¿no? Yo tengo mi forma de hacer ejercicios y de plantearlos, qué objetivos se quieren entrenar. Ella rápido los ha aceptado y le ha gustado. Soy trabajador, me gusta ser ordenado y estudioso. Hacer estadísticas, vídeos. Me gusta ver otras parejas, analizarlas, tener un control de todas las sesiones que hago con Ari. Lo apunto todo. 

A veces, el Big Data no lo es todo, se funciona por sensaciones. 

Por supuesto. Al final, el entrenador tiene muchos datos pero no los transmite todos al jugador. Yo, por lo menos no hago esto. Tengo 50.000 cosas pero son internas. Me pueden ayudar a nivel técnico o estratégico. Haces un resumen de todo y le dices a la jugadora lo que crees que le puede ayudar.

¿En qué habéis incidido con Claudio Gilardoni, entrenador de Paula Josemaría?

Que sigan haciendo bien las cosas que hacen bien. Que son muchas (ríe). Y luego intentar ir mejorando dentro del nivel altísimo de juego. Metiéndoles más herramientas técnicas y tácticas, que acaben mecanizando para situaciones complejas de partido. Haciendo ensayo y error. Y ver si esto está funcionando. 

¿Cómo se trabaja con Claudio Gilardoni?

Un gusto. Hablamos muchísimo. Sabe mucho de pádel. En Paraguay hicimos muchos cafés hablando del proyecto. En el sistema de como trabajar, somos parecidos. 

Después del final del curso pasado, ¿hay obsesión para acabar el año cómo número 1?

No. Para nada. Ni se habla ni lo noto. Ari ha aprendido mucho a focalizarse en los objetivos a corto plazo. Ir torneo a torneo y ya se verá qué pasa al final de la temporada. 

¿Se tienen que dejar de lado otras cosas para dirigir unanúmero 1 como Ari?

No, dejar de lado no. El proyecto de Ari lleva un porcentaje alto de mi tiempo pero no quiere decir que deje de lado lo otro. Al final, dejas un poco tu vida más personal. Me centro mucho en Ari y Paula, también en Sandra Bellver que es la otra chica que llevo de la academia y presto atención a los chicos que lleva más Juan.