La inteligencia de Paquito y Chingotto desactiva a los número uno

Navarro y Chingotto remontaron un partido ganando por 4-6, 6-4 y 6-4 con la grada totalmente volcada con ellos

Se convirtieron en los primeros finalistas del Barcelona Master Final tras una auténtica exhibición

Paquito y Chingotto hicieron un partido excelente

Paquito y Chingotto hicieron un partido excelente / WPT

Àngels Fàbregues

Àngels Fàbregues

Para que se hagan una idea de como fue la primera semifinal masculina del Boss Barcelona Master Final entre los número 1 Arturo Coello y Agustín Tapia y Federico Chingotto y Paquito Navarro les daré solo un dato: cinco de los 10 juegos del primer set se resolvieron en el punto de oro. Alucinante.

El juego espectacular y vistoso de Coello y Tapia a base de mísiles y acrobacias, lo contrarrestaban Paquito y Chingotto con algo más de paciencia, mucha inteligencia y corriendo todas y cada una de las bolas y sorprendiendo de vez en cuando Paquito con sus 'cuchillas' y Chingo con latigazos además de alguna dejadita y algún amague que dejaban en estático a los número 1.

Y con esta igualdad en el marcador y emoción en la pista se llegó al noveno juego donde Coello y Tapia conseguían una rotura, a la postre determinante, puesto que certificaron el primer set en el siguiente juego.

Arturo Coello y Agustín Tapia comentan la jugada durante la semifinal

Arturo Coello y Agustín Tapia comentan la jugada durante la semifinal / World Padel Tour

Muy diferente fue el segundo set que, por supuesto, arrancó con un punto de oro a favor de Navarro y Chingotto quienes en el cuarto juego y aprovechando el pequeño 'bajón' de juego de Agustín Tapia con más errores de los habituales ponían un 4-1 en el marcador y pese a que cedieron el servicio, de nuevo se ponían delante logrando un 4-6 que les llevaba al tercer parcial con la moral mucho más arriba que la de sus rivales.

La grada entregada a Paquito y Chingotto

Paquito se estaba gustando en la pista y el público agradecía su 'show', no esperan menos del sevillano a quien le gusta meterse a la grada en el bolsillo, lo que le da la energía que necesita para contrarrestar un desgaste físico que a sus 34 años ya empieza a hacer mella cuando lleva hora y media a la máxima intensidad.

En el pádel las sensaciones van por barrios y la buenas estaban del lado de Paquito y Chingotto cuando arrancó el tercer set.

Parecía que Tapia y Coello habían desconectado del partido y el espectáculo del andaluz con sus gritos, gestos, saltos guitarras y gestos desactivó un poco más a sus contrincantes que no daban con la tecla para regresar al juego del primer set. Abrumador, agobiante e incontestable. Y claro, Paquito que es el más listo del lugar, supo aprovecharlo a la perfección acompañado por un Chingotto omnipresente que lo dejaba todo en la pista.

"¡¡¡Chingo, Chingo, Chingo!!!", gritaban al unísono las 16.000 gargantas reunidas en el Palau Sant Jordi cuando con dos precisas voleas ponía el 4-1 en el marcador. Estaban desatados Paquito y el argentino cuando Tapia precisó asistencia médica por dolores en la zona lumbar. Todo se ponía en contra de los número uno.

Los números 1 resisten

Agustín siguió en pista algo mermado, pero no podía fallar a un público que le animó en todo momento y, secundado por un Coello que asumió toda la responsabilidad, lograron recortar diferencias con break incluido para ponerse 3-4.

Fue entonces cuando el que necesitó fisioterapeuta fue Navarro con problemas en el cuádriceps de la pierna derecha. El partido estaba siendo tan exigente que el físico empezó a jugar su papel.

Con todo, volvieron a equilibrarse las fuerzas en la pista tanto por el marcador (4-4) como por el juego. Tras un apasionante punto de oro ganado por Paquito y con el Sant Jordi coreando esta vez su nombre animado por el propio jugador, se llegó a la fase decisiva del partido.

Increíble lo que sucedió a continuación. Estos chicos elevan el pádel a otra dimensión. Coello salvó un punto de partido y en el punto de oro Navarro con un par 4 resolvió el partido. Mejor dicho, el partidazo.