¿Vale la pena pitar hoy a Dembélé?

Ousmane Dembélé, en el entrenamiento previo al partido contra el Atlético

Ousmane Dembélé, en el entrenamiento previo al partido contra el Atlético / Valentí Enrich

Albert Masnou

Albert Masnou

El Camp Nou vivirá hoy un día grande. En las horas previas al partido contra el Atlético de Madrid se han generado muchos alicientes, muchas expectativas. Hace cincuenta días que el Barça no juega en su feudo. La última vez fue el pasado 18 de diciembre contra el Elche. Desde entonces el cuadro de Xavi ha disputado siete partidos con un balance de tres victorias, dos eliminaciones (Copa y Supercopa) y dos empates. Hace también otros tantos días que el Camp Nou no permite un aforo completo por lo que la vuelta a la normalidad es un motivo de satisfacción. Es también el estreno de los fichajes de este invierno (Alves, Ferran, Aubameyang y Adama).

Es, al mismo tiempo, un partido que puede permitir al Barça volver a colocarse en puestos Champions cinco meses después... El choque está plagado de alicientes pero hay uno que parece primar por encima del resto: La vuelta de Dembélé al Camp Nou tras el serial de la no renovación.

Circula una corriente de opinión contraria al francés que pide una sonora pitada por su negativa a aceptar las condiciones de la junta directiva. Sin embargo, no han tardado en salir compañeros (Adama, Piqué, Aubameyang, Xavi...) asegurando que entendían la postura de Ousmane y rechazando la postura de negarle a jugar más con la camiseta del Barça. Un tiro al pie, dijo Xavi.

Dembélé no quiere renovar porque la oferta de renovación no satisface sus expectativas ni iguala las que le pueden llegar de Francia o Inglaterra pero que nadie descarte que en un futuro no muy lejano este acuerdo pueda producirse, siempre y cuando se eliminen los prejucios generados desde el club. 

Dembéle es un activo del Barça y habrá que aprovecharle hasta el final, renueve o no. De la misma manera que hace el PSG con Mbappé, la Juve con Dybala o el Chelsea con Azpilicueta, por poner unos ejemplos. Así pues, la afición que vaya al Camp Nou debe pensarse bien si pita a Dembélé porque es hacerle daño a un equipo que no va sobrado y es descargar la ira de una mala temporada contra un jugador que, simplemente, no ha llegado a un acuerdo económico con el club. A veces es complejo separar el grano de la paja y habrá que preguntarse antes porqué pasan ciertas cosas.