El ‘madridismo sociológico’ existe… y tiene mucho poder

Laporta denuncia la constante campaña de acoso y derribo contra el Barça

Ve la mano negra del ‘madridismo sociológico’ detrás del ‘caso Negreira’

Florentino y Laporta, en una imagen de archivo reciente

Florentino y Laporta, en una imagen de archivo reciente / SPORT

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

El 'madridismo sociológico' existe. Y tiene mucho poder. Más, si cabe, desde que Florentino Pérez preside el club blanco. ¿Qué es el ‘madridismo sociológico’ que denuncia Laporta? Pues es la corriente ideológica según la cual todo lo que hace el Madrid es bueno y todo lo que hace el Barça es malo. El ‘madridismo sociológico’ se encarga, a través de sus múltiples altavoces, de vanagloriar cualquier triunfo del Madrid, por pequeño que sea, al mismo tiempo que minimiza los éxitos del Barça, incluso los más grandes. El ‘madridismo sociológico’ se infiltra en todas las capas de la sociedad. Está, por supuesto, en los medios de comunicación. En la política. En la judicatura. En la banca. En todas aquellas altas instancias que mandan en España.

EL MEJOR EQUIPO DE LA HISTORIA

El ‘madridismo sociológico’ no entiende cómo un ciudadano de bien puede no ser del Madrid. Lo asume como una anomalía. Y ridiculiza a todos aquellos que son y se sienten culés. Porque eso es ‘pueblerino’. El ‘madridismo sociológico’ acusa al barcelonismo de tener complejo de inferioridad, cuando en realidad son los madridistas los que pecan de soberbia. El ‘madridismo sociológico’ no soporta el barcelonismo libre y valiente de Laporta (tampoco su declarado independentismo). Y aún soporta menos que fuera capaz de construir el mejor equipo de la historia de la mano de Messi y Guardiola. Un equipo, aquel Barça del sextete, que impuso su talento en todo el mundo y asaltó el Bernabéu con humillantes goleadas.

LA PERSECUCIÓN Y EL 'CASO NEGREIRA'

Este ‘madridismo sociológico’ ha redoblado su persecución ahora que el Barça empieza a salir de su triple crisis deportiva, económica e institucional. Nuevamente con Laporta al mando del club y con Xavi (otro culé odiado en la caverna) como ingeniero jefe del proyecto futbolístico. El presidente ve la mano negra de este ‘madridismo sociológico’ detrás del ‘caso Negreira’. Y de su imputación. Y esta teoría de la conspiración es la que defenderá en la asamblea de socios de hoy. En la que, una vez más, deberá hacer gala de su capacidad oratoria para hilvanar un discurso convincente ante los compromisarios.

LAS ACUSACIONES DE VÍCTOR FONT

Laporta se siente acosado. Pero no solo por ese ‘madridismo sociológico’ sino también por cierto entorno blaugrana que nunca ha congeniado con su particular forma de entender el Barça. Y menos aún con su actual gestión ‘familiar’. No dudo de la habilidad de Laporta (que ha hecho muchas cosas bien, pero también bastantes cosas mal) para convencer a quien sea con su talento comunicativo. Y estoy seguro de que, una vez más, saldrá airoso de este nuevo reto. Incluso sabrá replicar a Víctor Font, quien le acusó el miércoles de haber perdido, nada más y nada menos, que 1.054 millones de euros durante sus dos años y medio de mandato.

Porque Laporta, acostumbrado a las campañas de acoso y derribo, a la desestabilización constante, se ha curtido, como buen cruyffista, en el arte de defenderse atacando.