Laporta tiene que explicar toda la verdad del 'caso Negreira'

Joan Laporta, en una imagen de archivo

Joan Laporta, en una imagen de archivo / Valentí Enrich

Lluís Mascaró

Lluís Mascaró

La filtración interesada de la denuncia de la Fiscalía contra el Barça por el ‘caso Negreira’ pone más presión a Laporta. El presidente insiste por activa y por pasiva que el club blaugrana jamás ha pagado por obtener favorables arbitrales. Pero el escrito de la acusación es demoledor. Asegura que el Barça, a través de los ex presidentes Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, alcanzó un “acuerdo verbal estrictamente confidencial” con José María Enríquez Negreira para que “en su calidad de vicepresidente del CTA y, a cambio de dinero, realizase actuaciones tendentes a favorecer al FCB en la toma de decisiones de los árbitros en los partidos que disputase el club”.

Y la denuncia viene acompañada, por supuesto, del desglose de todos los pagos efectuados entre 2014 y 2018, que es el periodo investigado. Delito continuado de corrupción entre particulares en el ámbito deportivo, delito continuado de administración desleal y delito continuado de falsedad en documento mercantil son las gravísimas acusaciones que pesan contra Bartomeu, Rosell y el Barça, además de contra Negreira, Òscar Grau (ex CEO) y Albert Soler (ex Director de Deportes). Tremendo...

Ante semejantes argumentos de la Fiscalía, Laporta debe reaccionar ya y convocar, urgentemente, una rueda de prensa en la que tiene que explicar toda la verdad y nada más que la verdad sobre este turbio asunto que amenaza con destrozar la imagen del Barça para siempre. Por no hablar de las consecuencias deportivas y penales. 

UNA SITUACIÓN INSOSTENIBLE

La situación es insostenible y solo con luz y taquígrafos puede intentar salvarse el prestigio del club blaugrana. Laporta, en las escasas y controladas manifestaciones que ha hecho sobre el ‘caso Negreira’, habla de una campaña contra el Barça. Si es verdad que existe esa campaña, que existe un complot de los poderes fácticos económicos y políticos para provocar que el club no tenga más remedio que convertirse en sociedad anómima, debe explicarlo públicamente. Si es verdad que existe una maniobra para conseguir un Barça sometido y un presidente manipulable, debe explicarlo.

Y explicar, también, si estos pagos a Negreira forma parte de un ‘fondo de reptiles’ para compensar el antibarcelonismo existente en todos los órganos de gobierno del país desde tiempos inmemoriales. Que todo el mundo se quite las caretas. Estamos en el fango. Hundidos en la porquería. Y solo se saldrá a la superfície con la verdad. Sea la que sea. Duela lo que duela.