LA OPINIÓN

Los futbolistas críticos y la crítica externa

Joan Vehils

EN MANOS DEL VESTUARIO. Los jugadores del Barça deberían estar agradecidos a la prensa por las críticas efectuadas tras las derrotas frente el Madrid y el Milan. Algo no estaba funcionando y así se dijo. No hay que ser muy astuto para apreciar que en esos tres encuentros el juego del Barça no fue el mismo que en otras ocasiones. No obstante, tampoco hay que ser tan incrédulo como para creer que el exitoso ciclo estaba tocando su fin. Ni una cosa, ni la otra. La crítica externa no siempre tiene intención de destruir, sino todo lo contrario. En el mundo del fútbol, los presidentes y directivos están obligados siempre a hablar bien del equipo o a callar. Es una norma no escrita que el que se la salta está 'muerto'. Por nuestra parte, los periodistas tenemos la obligación de explicar lo que vemos aunque en ocasiones no guste a los futbolistas o directivos. En los últimos partidos, los jugadores del Barça han demostrado que no viven ajenos a la realidad. El propio Gerard Piqué reconoció minutos después de la derrota ante el Milan que no había excusas, que el Barça no había estado bien. Criticarse a uno mismo y aceptar la crítica externa es la mejor manera de afrontar los problemas.

EL PSG, COMO EL MILAN. Continuando con las mismas, el Barça debe afrontar el encuentro de París contra el PSG como si fuera una final. Los azulgranas son muy superiores y solo pueden tener problemas en superar la eliminatoria si se lo creen. Eso fue lo que sucedió en Milán.