El Espai Barça ya es imparable

El Espai Barça ya es imparable

El Espai Barça ya es imparable / FCB

Ferran Correas

Ferran Correas

Aunque en el club alguien se llegó a plantear un aplazamiento dada la delicada situación económica de la entidad, el Espai Barça ya es imparable. Es un proyecto capital para el club e indispensable para seguir creciendo y generando recursos. El presidente Joan Laporta ha reiterado en sus últimas intervenciones que el Espai Barça “es una cuestión de alto calaje y un motor de transformación de la entidad”. El proyecto es indispensable para el club. Laporta se ha marcado como objetivo volver en otoño del 2024 a un Camp Nou ya remodelado tras una temporada de destierro en Montjuïc y la maquinaria hace meses que trabaja para cumplir los plazos.

El inicio de las obras del Camp Nou es visible en el Gol Sur y los siguientes pasos están marcados. El club tiene prácticamente cerrada la financiación con Goldman Sachs, que no podrá exceder los 1.500 millones de euros. Pero antes de firmarla, debe concretarse la adjudicación de las obras de remodelación del estadio. Son unas cuantas las empresas que se han ido apartando del concurso debido a una serie de cláusulas de penalización que ha querido imponer el club y que pueden ascender hasta los 90 millones de euros por retrasos en las obras y plazos de entrega.

Son tres las empresas finalistas, dos españolas y una extranjera. Las españolas, FCC y la alianza formada por Ferrovial y Acciona. A principios de enero, deben presentar las propuestas definitivas, estimando el club que el coste del nuevo Camp Nou debe estar alrededor de los 900 millones de euros. Semanas después se adjudicará la obra. Estará entonces el equipo financiero de la entidad en disposición de firmar con Goldman Sachs, que ya avanzó en su día 180 millones y que también tendrá opinión en el momento de decidir la empresa que ejecutará la obra.

El Barça también empezará a trabajar en el traslado al Estadi Olímpic Lluís Companys. Lo deberá hacer en la adecuación de la instalación. Se estima en el club que deberán gastarse unos 20 millones de euros en ello, un dinero que es a fondo perdido. Y también deberá trabajar en una campaña dirigida a los socios para explicar cómo será el traslado.

Estima el Barça que dejará de ingresar unos 100 millones de euros, pues muchos abonados son partidarios de cogerse una temporada sabática y una excedencia y no se podrán vender muchas entradas, teniendo el club que decidir en los próximos meses la manera en que se decidirá la asistencia. Si será rotatoria, si se tratará partido a partido...

Irse a Montjuïc es la parte más fea de un proyecto que es indispensable para el club y que avanzará de forma significativa en los próximos meses. En enero, habrán noticias importantes.