Economía de guerra

Mientras la preparación del equipo azulgrana sigue su curso para llegar en la mejor forma posible a mediados de junio, cuando se intuye el regreso de la competición liguera, paralelamente el club trabaja para darle forma, poco a poco, a la plantilla de la próxima temporada. 

Está muy claro que el principal objetivo de mercado es el argentino Lautaro Martínez. Pero yo me pregunto: ¿A cualquier precio? Leí con suma atención el artículo en este mismo diario de Josep Maria Casanovas en referencia al elevado coste de este delantero. Estoy de acuerdo. En circunstancias normales y en otras épocas, el Barça hubiera depositado la cláusula de rescisión de 111 millones de euros para traerse al jugador, pero en estos momentos excepcionales, esta cantidad no sirve como referencia por mucho que su equipo, el Inter, se mantenga en sus trece.

Sí considero que Lautaro es un futbolista con mucho margen de evolución a sus 22 años y que crecerá en el Barça junto a delanteros tan contrastados como Messi o Luis Suárez. De los jugadores que hay en equipos que pueden vender por no estar en el ‘top’ futbolístico, el argentino y Haaland son las perlas del mercado y los que tienen más potencial y futuro, Mbappé aparte, así que creo que hay que hacer todo lo posible para traerlo. Pero siempre sabiendo jugar tus cartas. 

Lo he dicho en otras ocasiones y lo reitero. Es el momento de ejercer el arte de valorar a tus jugadores como los mejores y los más apetecibles, y en cambio, no aceptar siempre lo que te piden los otros clubs. Estamos inmersos  en una economía de guerra, donde se saldrá con la suya el club que muestre una mayor capacidad para hacer las operaciones de cambio de jugadores que sean más beneficiosas, no solo a nivel de precio, sino teniendo en cuenta otros factores, como la edad de los futbolistas pretendidos o la posición que ocupan en el terreno de juego. 

La columna vertebral del futuro

Es en estos momentos cuando más claras has de tener las demarcaciones que quieres reforzar con jugadores de futuro para los próximos siete u ocho años. El Barça debe tener todas las de ganar en estas negociaciones, pues al fin y al cabo, lo que necesita el equipo es reforzarse en dos o tres posiciones clave y donde hacer la inversión. Sin duda, en la delantera, con Lautaro como el pretendido, pero también hay que pensar en el relevo en el central y el mediocentro defensivo. Se trata de asegurarse la columna vertebral del futuro. 

Tus bazas son mejores porque éste es un año en el que vuelven cedidos de mucha calidad, como Rafinha, Todibo o Aleñá; tienes jugadores jóvenes en la plantilla con mucho cartel, como Semedo o Arthur; y has fichado a promesas como Trincao o Pedri que deben dar mucho que hablar. Cuentas, en definitiva, con muchas opciones y un amplio abanico para sacar a los jugadores con mercado y que, hablando claro, no nos tomen el pelo.

Cada día van saliendo nombres nuevos, posibles opciones de trueque, y yo soy escéptico en este punto e intento no hacer caso a todos los rumores que salen por la ausencia de fútbol. Me encantaría, además, un punto de discreción en los movimientos, no telegrafiar tu estrategia forma parte también de la negociación. Hemos tenido la sensación en  el último mes de que algunas operaciones ya se han dado por cerradas, pero en realidad aún no se ha hecho nada. Estamos en economía de guerra, pero no solo el Barça, también los clubs más ricos como el Madrid, o los clubs-estado como el City o el PSG. La excepcionalidad es para todos... y aquí tenemos buenas cartas para ganar la partida.