Cantera, sí; técnicos valientes, también

Eric Garcia junto a Pep Guardiola

Eric Garcia junto a Pep Guardiola / sport

Albert Masnou

Albert Masnou

La cantera es cuestión de generaciones, la cantera es cosa de hornadas... Esta es una teoría que tantas veces hemos escuchado y que uno duda de que sea realidad. Soy de los que piensa que la cantera siempre está preparada. Solo es cuestión de entrenadores valientes. Si el inquilino del banquillo del Camp Nou es atrevido, no tiene miedo, mira más allá del resultado o deja de apostar solo por las vacas sagradas como garantía de títulos, la cantera tiene opciones de llegar al primer equipo y, como siempre está preparada, de responder positivamente.

El club lleva muchos años trabajando el fútbol base con un tacto especial, independientemente de quien mande. Hay una sensibilidad para con los jóvenes que convierten a las categorías inferiores del club en un foco de atención para ojeadores extranjeros que buscan recoger lo que otros no se atreven: Jugadores que ya están listos o les queda muy poco para dar el salto al profesionalismo. La historia está repleta de casos así, de jugadores que han visto que la puerta del Camp Nou estaba cerrada y han probado suerte, muchos con éxito, en el extranjero.

Casos así, como el de Piqué antes o Eric García ahora, se entienden porque han renunciado a su sueño de niño porque otro les presentaba un proyecto más prometedor. Y el Barça no podía hacerlo porque el entrenador que dirigía al primer equipo no participaba de esta dinámica: “Suficientes líos tengo yo para preocuparme de los chavales”. Y ante esta teoría, también errónea, el club es el que acaba perdiendo porque el talento huye en otras direcciones. En tiempos de dificultad, cuando el equipo no funciona o cuando hay problemas económicos (como ahora motivado por el COVID), es cuando se mira más a la cantera y cuando a esta se le abre un mundo lleno de opciones que hasta entonces se le negaba. Y, como siempre, responderán.