Las explicaciones del trío del 800 femenino tras su eliminación

Lorea Ibarzabal, Daniela García y Lorena Martín no superaron la primera ronda en los Mundiales de Budapest

La situación fue opuesta al 800 masculino con la clasificación de Adri Ben, Saúl Ordóñez y Mohamed Attaoui

Lorea Ibarzabal no estuvo nunca en carrera... una pena

Lorea Ibarzabal no estuvo nunca en carrera... una pena / EFE

David Rubio

Las series eliminatorias de los 800 metros femeninos han deparado la eliminación de Lorea Ibarzabal, Daniela García y Lorena Martín, quienes de una u otra forma han pagado la dictadura de las marcas en una prueba que ha crecido exponencialmente en parte gracias a las nuevas zapatillas. Nada que ver con las series masculinas, en las que el trío formado por Adri Ben, Saúl Ordóñez y Mohamed Attaoui se clasificó por puestos para las semifinales de este jueves.

La primera en salir fue Lorea Ibarzabal, la única de las tres con una marca por debajo de los dos minutos (1:59.88) que la situaban cuarta del año en su serie (pasaban tres más los tres mejores tiempos de las siete carreras). Y la madrileña no estuvo nunca cómoda para acabar descolgada con 2:06.33. Su serie la ganó con 1:59.53 la portentosa británica Keely Hodgkinson, quien opta al podio con fundados argumentos.

"No tenía fuerzas. Yo creo que no he sabido gestionar la presión y los nervios de un gran Campeonato. También ha sido una temporada muy larga y me ha costado estas últimas semanas, pero veníamos en buena forma. No me he encontrado bien de salida y se me ha hecho eterno", comentó a los medios españoles en la zona mixta.

"Pasando el 400 no iba con fuerzas y es una pena por mi familia, mis padres y mis amigos que estaban en la grada. Iba como vacía y me daba rabia de no poder estar luchando. Ha sido un poco todo, la presión de estar aquí por primera vez y que haya tantos ojos en mí", añadió Ibarzabal.

Con tan solo 21 años, la balear Daniela García llegaba como campeona europea sub'23 y su marca de 2:00.58 la habían superado este año cinco rivales. Y lo cierto es que compitió bien, pero le faltó un poco más de empuje en la recta y acabó séptima, bajando de 2:01 por tercera vez en su carrera (2:00.92) con la keniana Mary Moraa primera, otra de las candidatas a las medallas (1:59.89).

Daniela García, motivándose antes de la carrera

Daniela García, motivándose antes de la carrera / EFE

"He disfrutado y ha sido una experiencia irrepetible, porque nunca más voy a vivir mi primer Mundial. Lo que más feliz me hace es haberme sentido parte de la carrera. En la contrarrecta he querido avanzar, pero no ha podido ser. Es muy complicado recuperar posiciones con estas rivales y al final me he visto fuerte y he empujado, pero ellas han empujado más que yo", comentó con una abrumadora naturalidad.

Con las cerezas de Pachá en uno de sus pendientes y con un trébol de cuatro hojas en el otro, la benjamina del trío da por acabada la temporada, "porque ya me toca descansar en mi último año de sub'23. Mi objetivo próximo es bajar de dos minutos, pero no ha podido ser. Así dejo algo para la temporada que viene, que es un objetivo muy bonito. ¡Me voy a la isla! Me quiero ir de vacaciones a algún sitio, pero soy muy familiar y lo que me apetece es irme a casa".

Por último, Lorena Martín aspiraba a un 'milagro' después de una temporada y media parada por una grave lesión y lo cierto es que fue la que más cerca tuvo la clasificación, pero un toque de la brasileña De Lima en la última curva cuando estaba progresando la frenó en seco. Pese a ello, acabó quinta con 2:01.25, a 33 centésimas de una clasificación que logró la sudamericana.

Lorena Martín peleó hasta el final por la tercera plaza

Lorena Martín peleó hasta el final por la tercera plaza / EFE

"No puedo pedir más. He empezado en marzo y estar aquí... En tres años me he operado dos veces y de aquí a París me puede pasar cualquier cosa, ya sea bueno o malo. Las tres podemos estar en semifinales, pero hoy no nos ha salido y ya está. Tengo planeado correr hasta mediados de septiembre y me encantaría bajar de dos minutos. Yo creo que valgo 1:59 altos, porque cuando hice 2:00.39 (sexta marca del año en su serie) no estaba entrenando así de bien, pero te tiene que salir. Veremos a ver...", comentó.

"La carrera que yo quería era estar metida hasta el 600 y no he gastado fuerzas. Sabía que si salía ahí tendría opciones, pero me han frenado. Al final estás corriendo con tías de 1:57 y cuando tú tienes un cambio ellas tienen dos. Además, el que tenía me lo han cortado en el 650. Si me dejan hacer ese cambio, creo que me habría metido tercera", añadió la salmantina.

Por cierto, que la estadounidense Athing Mu disipó las dudas dándose un soberano paseo exhibiendo su majestuosidad con una altura de cadera que convierten sus piernas en algo inacabable como sucede con la azulgrana Yulimar Rojas en el triple salto. Ganó su serie con 1:59.59 y... llega a tope. Es la actual campeona olímpica y universal.