Lorenzo, rumbo a Japón "para buscar soluciones"

Jorge Lorenzo atraviesa una profunda crisis. Lo que empezó como una aventura de ensueño en el mejor equipo del Mundial, junto al ganador de cinco de los últimos seis títulos de MotoGP, Marc Márquez, se ha convertido en una pesadilla.

El mallorquín, tricampeón en la categoría reina con Yamaha, vivió dos temporadas muy complicadas en Ducati, aunque al final consiguió su propósito y ganó carreras con la Desmosedici. La primera llegó precisamente en Mugello, hace un año. Era tarde. Los de Borgo Panigale se habían decantado ya por Petrucci y Jorge tuvo que buscarse otro destino.

Una conversación con Alberto Puig le abrió las puertas de Honda y Lorenzo se lanzó de cabeza al desafío. Sabía que con Márquez al otro lado del box su rol no sería de número uno, pero lo asumió convencido de que acabaría ganando. 

De momento, en seis carreras, su mejor resultado es el 11º puesto de Le Mans. En Mugello acabó 13º. Pero Lorenzo no es de los que se rinden y por eso ha pedido soluciones urgentes a Honda: “Entiendo perfectamente la situación. Es difícil tener que cambiar mucho la moto cuando tienes a un piloto que está ganando cinco títulos, pero ninguna de las dos partes está contenta con los resultados, ni Honda ni yo y, si queremos cambiar no sólo basta con acumular kilómetros... hay que cambiar cosas”

Rumbo a Japón

Tras la carrera en Italia, Lorenzo informó que este lunes viajará a Japón para trabajar en la fábrica de Honda directamente en las nuevas piezas aerodinámicas que ha pedido, especialmente en la zona del depósito, tratando de solventar la fatiga por la posición en carrera. Además habrá test en el túnel de viento y de simulación.

"Con la moto actual me canso, no puedo empujar, tengo que sobrevivir, voy con la lengua fuera...así que vamos a intentar buscar soluciones. No puedo desvelar de quién parte la idea. Vamos a buscar en ergonomía. Hay que trabajar, aprovechar al máximo el tiempo. Se trata de que pueda atacar más en la carrera y pueda llegar al final con más energía", explicó.

"Ellos han cogido los billetes. La voluntad de Honda siempre ha estado ahí, lo que pasa es que por A o por B, hasta ahora, no hemos dado grandes pasos. He probado muchísimos depósitos, pero ninguno me ha dado la solución que espero, que me ayude a relajar los brazos y a ahorrar más energía. Pero no me cabe ninguna duda de que lo voy a hacer pronto", añadió Jorge.

No todo es negativo. Según el balear, "los avances que hicimos en Jerez y Le Mans los mantenemos. Quizá nos ha costado más en Mugello por determinadas razones, pero no creo que todos los fines de semana sean así y más si tenemos piezas que me hagan la vida más fácil. Lo positivo ha sido la salida. Más o menos he entendido cómo salir con esta moto".

Además del problema ergonómico, Lorenzo apunta que "los otros dos apartados que creo que tiene que mejorar la moto son algo más largo de conseguir. Aquí la situación es diferente a cuando fui a Ducati de líder. Para Honda el piloto número uno, el que está ganando carreras y campeonatos y pilotando de manera excelente, es su prioridad, pero sí puede hacer un plan diferente, un plan B para satisfacer también a su segundo piloto oficial y hacer una moto más fácil para todos los pilotos, como actualmente ha conseguido Ducati, Honda es la única que lo puede  hacer, por potencial económico e historial. Y yo confío en ellos. Me han trasmitido esa voluntad".