Convención

Científicos de todo el mundo afirman que solo hay esperanza frente al cambio climático si hay acción política

Expertos internacionales reunidos en la séptima edición de Starmus, en Eslovaquia, recuerdan que ninguna modificación del clima había sucedido tan rápido en la historia de la Tierra

La meteoróloga canadiense Katherine Hayhoe fue una de las ponentes de Starmus 2024

La meteoróloga canadiense Katherine Hayhoe fue una de las ponentes de Starmus 2024 / Max Alexander/Starmus

Verónica Pavés

Verónica Pavés

Buscar la esperanza. Es el lema que mueve a los mismos científicos que tratan de buscar una solución a la grave amenaza que supone la subida del nivel del mar, el aumento y la voracidad de los incendios, la mayor envergadura de los huracanes o la llegada de inundaciones otrora inimaginables debido al calentamiento global. Este año el planeta está sufriendo un aumento de las temperaturas sin precedentes, habiendo alcanzado el temible grado y medio de calentamiento por encima de la época preindustrial. Pero en este escenario, reconocidas figuras de la ciencia han invitado, en la séptima edición del Festival Starmus, celebrado esta semana en Bratislava (Eslovaquia), a realizar una reflexión más profunda sobre el estilo de vida de la humanidad y la acción.

En esta edición el Festival Starmus, que nació con el propósito de divulgar la ciencia del espacio, ha querido adaptarse a los nuevos tiempos y darle un giro a su propósito inicial. Así, por primera vez, ha incluido entre sus panelistas a científicos del clima, que durante la primera sesión del evento, titulado ‘The Future of our home planet’, han insistido en la necesidad de pasar a la acción para proteger nuestro hogar, “un planeta único en el universo que ha dado lugar a algo tan increíble como la humanidad”, tal y como resaltó el divulgador científico David Eicher, que actuó de maestro de ceremonias durante la primera sesión, que tuvo lugar ayer en Bratislava (Eslovaquia).

La primatóloga y conservacionista Jane Goodall, en su intervención

La primatóloga y conservacionista Jane Goodall, en su intervención / Max Alexander/Starmus

Ha sido la famosa primatóloga y conservacionista Jane Goodall quien abrió la sesión destacando la necesidad de “poner atención en el problema que sufre nuestro planeta”. La científica, que dio la bienvenida a los más de 2.000 asistentes de la sala emitiendo los característicos gruñidos de un primate, insistió en que aún hay tiempo para actuar, pero que el deshielo, la subida del nivel del mar, las tormentas o las graves inundaciones que están sufriendo algunos lugares del mundo hacen que sea urgente tomar medidas.

La primatóloga ha pedido a los medios de comunicación que difundan historias de “esperanza” porque “la tasa de suicidios se ha disparado”. Precisamente, uno de los lemas visibles en el escenario de las intervenciones era: “Preocupación científica+acción=esperanza”.

Sobre los datos que sustentan el calentamiento global hablaron gran parte de los ponentes, como el físico Steve Chu, que relató que, en el estado de emisiones actual, el mundo se dirige hacia un calentamiento de hasta 3 grados por encima de los niveles preindustriales (el Acuerdo de París fijó un tope de 1,5ºC, al que ya se ha llegado). Esta previsión está situando a la humanidad en una situación similar a la que vivieron los pasajeros del Titanic: “Vemos el iceberg y no hacemos nada por evitarlo”.

“Vemos el iceberg, pero no lo evitamos”

Maureen Raymo, científica climática, advirtió además de dos realidades que ya han llegado a su punto de no retorno: la pérdida de biodiversidad y la subida del nivel del mar. “Ninguna de las dos son ya reparables en una escala que pueda ser perceptible para la humanidad, por muchos esfuerzos que hagamos”, insistió la científica, que destacó que “aunque ha habido otros cambios climáticos, nunca se ha visto ninguno que se haya producido en un periodo de tiempo tan corto”.

Los polos se funden y el nivel del mar sube

Los polos se funden y el nivel del mar sube / Pixabay

La científica abundó en la “incontestable” evidencia que pone de manifiesto que los polos están perdiendo su cobertura helada. “Si Groenlandia se descongela del todo, el nivel del mar aumentaría 5 metros en todo el mundo, pero si lo hiciera la Antártida, estaríamos hablando de 50 metros en todo el mundo”, insistió.

Raymo hizo hincapié, asimismo, en las dificultades para entender qué significa esto en el mundo actual, dado que “el nivel del mar ha tenido muchas deformaciones a lo largo de la historia” y es complicado saber hasta dónde pudo llegar en el pasado. No obstante, se ha llegado a constatar que hace tres millones de años estuvo 12 metros más alto que en la actualidad”.

Para evitar que la situación vaya a más, los participantes en la jornada hicieron hincapié en la necesidad de que la población y los gobiernos actúen para reducir las emisiones, restaurar la naturaleza y adaptarse a la nueva situación climática.

Manifestación climática

Manifestación climática / Efe Verde

En este sentido, Jane Goodall puso de relieve la importancia de que la población sea consciente del impacto que sus acciones tienen en el planeta cada día. Un discurso que fue ratificado por las palabras de la meteoróloga canadiense Katherine Hayhoe, cuyo discurso versó sobre la “ecuación de la esperanza”.

Es necesario conectar “con el corazón” de la gente

La meteoróloga insistió en que gran parte de la inacción climática se explica porque es un problema que se ha afrontado únicamente desde el punto de vista científico. “Aunque hay mucha gente preocupada, al menos el 60% de la población mundial, no hemos conectado la mente con los corazones de las personas”, insistió Hayhoe.

Para la investigadora, es vital que se entienda cómo el cambio climático puede afectar al día a día de la población, pues de otra manera será imposible “conectar” con ese corazón. “Al final, de lo que muchas personas hablan no es del cambio climático, sino de que el clima está muy raro”, insistió.

“Al final, de lo que muchas personas hablan no es del cambio climático, sino de que el clima está muy raro”

Katherine Hayhoe

— Meteoróloga

Por esta razón, considera que hay que divulgar más los aspectos referentes a los efectos del cambio climático en la salud, el porvenir y el bienestar de la población. “Al fin y al cabo, para entrar en acción no debes ser ni científico ni activista, solo tienes que ser humano, porque nuestras vidas dependen de la naturaleza”, insiste.

La científica aprovechó la cita para recordar algunas de las últimas palabras del físico teórico Stephen Hawking en una de las ediciones de Starmus donde ambos coincidieron. Y es que allí, hace ya casi una década, el físico insistió en que un reto tal como la terraformación de Marte era mucho más sencillo que abordar la crisis climática.

Raymo, por su parte, insistió en que la pelota no está tanto en el tejado de la población como en el de los gobiernos. “Se deben comprometer a la acción climática, nos estamos quedando sin tiempo”, remarcó. Pero no por ello desestimó el poder de la población y alentó a los ciudadanos a “alzar la voz” ante las injusticias que surgen de la inequidad climática y a votar. “Votar es nuestro mayor poder, debemos utilizarlo”, concluyó. 

.................

Contacto de la sección de Medio Ambiente: crisisclimatica@prensaiberica.es