El resurgir del cholismo

El Atlético ha vuelto. Muchos se apresuraron en descartarlo de la lucha por la Champions. Pues bien, de eso nada. Con su exhibición ante la Juventus, los de Simeone demostraron que su obsesión por levantar la ‘Orejuda’ sigue intacta y se dejaran la piel en el campo para conseguir el ansiado trofeo, que con tanto dolor se les escapó en dos ocasiones ante el eterno rival.

Esta vez, el Atleti quiere reescribir la historia y besar la gloria en su estadio el 1 de junio. El primer paso lo dieron este miércoles, en el que sin duda fue el mejor partido del curso para el cuadro colchonero, que llegaba a la cita inmerso en una trayectoria irregular. 

Un mar de dudas

Lo cierto es que en vísperas de la exhibición ante la Juventus, el Atlético despertaba muchas dudas. Los colchoneros invirtieron en verano para optar a todos los títulos, pero las reiteradas lesiones de hombres clave y el rendimiento insuficiente de sus nuevas adquisiciones se tradujo en un rumbo vacilante. La fiabilidad, seña del ‘cholismo’, falló en fechas decisivas. 

Buenos ejemplos son la inesperada eliminación copera ante el Girona o el 0-0 en Brujas que privó al Atleti de ser primero de grupo. Para más inri, los rojiblancos recibían a la Juve en la cúspide de su inestabilidad, después de perder ante Betis y Real Madrid, y ganar por la mínima al Rayo. Aunque más que los resultados presentaba dudas el juego del equipo, falto de ideas y sin pegada.

Golpe de efecto

Unas debilidades que este miércoles se esfumaron. Volvió la presión asfixiante del primer al último hombre, la conexión con la grada, los contragolpes en estampida, la lucha por cada balón y la solidez defensiva. El ‘Cholo’ apostó por su vieja guardia. Los Godín, Filipe o Juanfran rindieron al máximo nivel, como si fueran inmunes al paso del tiempo.

Fundamental fue también el regreso de Koke y Diego Costa, que se fundieron pese a no estar a su mejor nivel. El Metropolitano correspondió a su entrega con un ambiente volcánico desde el minuto uno al 90, que recordó a las noches mágicas del Vicente Calderón.

El Atlético ganó por corazón y entrega, cierto, pero también por juego. Porque cuando se crecen los colchoneros contraatacan como nadie, pero también supieron mover rápido el balón en el juego posicional. Fue, en definitiva, el regreso a la esencia.

Letales en Europa

Una fórmula de contrastado éxito, que ha consagrado al Atlético como uno de los mejores equipos de Europa en la última década. En la era Simeone, los números son de miedo. Más aún ante su afición, clave como es el factor emocional en el juego del ‘Cholo’. Los colchoneros encadenan 13 eliminatorias de Champions League sin perder en casa. La última vez fue ante el Ajax en 1997.

Desde la llegada del argentino, el Atleti ha alcanzado dos finales de la Champions, ha caído una vez en ‘semis’ y otra en cuartos, además de hacerse en dos ocasiones con la Europa League.