Carta abierta de Berta Bonastre, jugadora de las RedSticks

Bonastre ha sido jugadora de la selección absoluta femenina los últimos 12 años. Desde aquel primer encuentro frente a Alemania, en marzo de 2009, 203 han sido los partidos oficiales donde la delantera catalana se ha enfundado la camiseta de las RedSticks. Dos diplomas olímpicos, en sendas participaciones en los JJOO de Río de Janeiro 2016 y Tokyo 2020, la histórica medalla de bronce en la Copa del Mundo de 2018, el también bronce en el Campeonato de Europa de Amberes en 2019 y las victorias en la World Round 2 en 2017 y en las Hockey Series de 2019 , son algunos de los éxitos que adornan una impecable trayectoria internacional.

ADIÓS. Nunca hay un buen momento para decir adiós… Especialmente a una etapa que ha guiado mi compás y decisiones durante 17 años de mi vida y que se termina en un momento y de una forma inesperada.

Pero en el hockey como en la vida hay etapas, y por lo que sea acaban para traernos de nuevas, con objetivos distintos, pero seguro que igual o más emocionantes. Hoy pongo punto final a mi carrera como jugadora de hockey internacional, y lo hago con lágrimas en los ojos, ya que el hockey para mi es un regalo que me ha dado la vida, me ha formado como persona y, gracias a éste, he podido vivir experiencias únicas viajando por todo el mundo, conocer a personas inolvidables y cumplir sueños que tenía desde que era una niña. Siempre he intentado tener una actitud alegre, trabajadora y disciplinada; he entrenado con perseverancia, trabajo y rigor; y he guiado mis acciones y mi vida a base de esfuerzo, constancia y sacrificio. No se lo que me depara el futuro, pero de lo único que estoy segura es de que el hockey me ha dado unos valores que me van a acompañar el resto de la vida. Me voy tranquila, contenta por todo lo vivido y orgullosa por haber tenido la oportunidad de formar parte de algo muy especial y mágico, “La Piña” que formamos con mis compañeras de la Absoluta Femenina.

Me gustaría pensar que toda la gratitud y pasión por el hockey, así como todo el trabajo hecho y que continuará haciéndose con la Piña, será transmitido y podrá guiar a las futuras generaciones que nos siguen de cerca y que crecen en todos los clubs de nuestro país. Durante todos estos años, he tenido la oportunidad de ver, experimentar y luchar por una evolución positiva respecto a la igualdad de género en nuestro deporte, y aunque creo que hay mucho camino por recorrer y más cosas que mejorar, está claro que se debe seguir avanzando en esta dirección.

No quería acabar sin decir GRACIAS. Con esta palabra quiero llegar a todas las personas que me han acompañado en este irrepetible y maravilloso camino, con especial mención a mi familia que me inculcó desde que nací el amor por este deporte. Habéis sido un apoyo incondicional, siempre presentes en las buenas y en las malas, aconsejandome y acompañándome en cada decisión, continuamente preparados para un buen gesto, una palabra amable o un abrazo tranquilizador. Por esto y por los valores y principios que me habéis transmitido, gracias. Gracias también a mis amig@s y a mi pareja. Por estar siempre. Por entender mis ausencias en momentos importantes y ser el refugio que necesitaba para desconectar, reír, llorar o simplemente compartir un instante junt@s, sois lo mejor.

Gracias a todas y cada una de las compañeras que han formado parte de esta etapa. Me quedo con cada celebración de gol, cada risa, cada viaje, los juegos de cartas, las conversaciones interminables, los gritos prepartido, las medallas, bailoteos, lágrimas, sudor, partidos que erizan la piel… Pero sobretodo me quedo con las cosas tan valiosas que he aprendido de cada una de vosotras. Al final no puedo estar más agradecida de haber formado parte de este equipo, que enriquece en todos los aspectos y me ha dado lecciones de por vida. Por último, pero no menos importante, gracias a toda la afición del hockey por apoyarnos durante todo este camino. Seguid acompañando al hockey y a la Absoluta Femenina, os necesitamos y nuestro deporte también. Con todos vosotros “la piña” tiene el mejor de los sabores. A todos y cada uno de vosotros, gracias de corazón. Hasta pronto, Berta