Del infierno a la gloria: Kébé deja atrás un calvario de un año y medio por lesión

El centrocampista de Mali reaparece en el triunfo ante el Cádiz después de 17 meses de baja por culpa del menisco

"He soñado un montón de veces con este momento; No sé describir con palabras lo que he sentido", asegura

Kébé reapareció ante el Cádiz

Kébé reapareció ante el Cádiz / GIRONA FC/NURI MARGUÍ

Tatiana Pérez

Solo las personas que hayan topado con una experiencia similar entenderán el calvario que ha tenido que pasar Ibrahima Kébé. El centrocampista de Mali, de 23 años, reapareció este sábado en la valiosa victoria ante el Cádiz (0-1), dejando atrás, por fin, una durísima lesión en la rodilla izquierda con afectación al menisco, que lo ha tenido en blanco durante más de una temporada. En total, han sido 17 meses de baja. Hasta la última jornada, el noveno partido del curso 2023/24, la última aparición de Kébé con el Girona había sido en mayo de 2022, en Segunda División, en la visita del Mirandés a Montilivi. Ha llovido mucho desde entonces.

"He pasado un año y medio muy difícil y largo. Me he sentido superfeliz de poder debutar con el Girona en un campo tan complicado como es el Nuevo Mirandilla y, sobre todo, con victoria. El resultado es lo que me hace más feliz, pero obviamente mi debut también. Tenía muchas ganas de jugar y, por fin, ha llegado el día", aseguró Kébé después del partido con aquella sonrisa que tanto lo caracteriza y que nunca ha perdido, a pesar de las numerosas complicaciones que ha sufrido durante su proceso de recuperación. Cuando pasó por quirófano en junio de 2022, en principio tenían que ser unos cinco meses de baja.

Kébé, que celebró el ascenso en Primera División con muletas, ha tenido que tener mucha paciencia hasta hacer realidad el sueño de estrenarse en la máxima categoría del fútbol estatal. "He soñado un montón de veces con este momento. Cuando Míchel me ha llamado, no me lo creía. No sé ni como describirlo. No tengo palabras para expresar qué he sentido. He tenido bastantes nervios, y tengo que pararme a valorar todo lo qué he vivido, pero cuando el árbitro ha pitado el final del partido estaba realmente en la gloria. Como en una nube, muy arriba. Soy muy feliz, de verdad", explicó. El centrocampista de Mali sustituyó Yangel Herrera en el minuto 88. "Los compañeros lo han celebrado conmigo", añadía ilusionado.

"Nosotros no seguimos la clasificación. Nos limitamos a llevar a cabo nuestra idea, que nos está saliendo muy bien. Estamos contentos. Confiamos en la estrategia del míster, a ver hasta donde nos lleva. Tendremos que trabajar más durante la parada", valoraba el futbolista ya desde dentro del terreno de juego. Con un reto claro: "Tengo la idea de ganarme más minutos para ir cogiendo sensaciones. Quiero ayudar el equipo, nada más».

También lo bendice el Girona, que suma un efectivo más para la causa, después de asaltar Cádiz con nueve bajas en la plantilla. El parón de selecciones selecciones tiene que servir para recuperar jugadores.