El Girona no puede acabar con la maldición realista

El ogro realista volvió a Montilivi. El Girona no sabe qué hacer ante él y ya es el cuarto partido en Primera en el que no consigue ganar a una Real Sociedad que se llevó un valioso botín (0-0). Cuando no ofreces nada más que el rival pasa lo que tiene que pasar: un empate insulso que de poco sirve a los gerundenses. Los de Eusebio no pudieron dar continuidad a las buenas sensaciones del Bernabéu.  

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Liga Santander

GIR

0

0

RSO

Alineaciones

Girona
Bono; Ramalho, Juanpe, Alcalá, Raúl Carnero; Douglas Luiz (Pardo, 79'); Portu, Aleix García, Granell, Choco Lozano (Borja García, 65'); Stuani (Doumbia, 87').

Real Sociedad
Rulli; Zaldua, Raúl Navas, Llorente, Muñoz; Zubeldia, Zurutuza (Pardo, 79'), Merino (Moreno, 88'); Juanmi (Bautista, 73'), Sandro y Oyarzabal.

Goles

No hubo.

Árbitro

Prieto Iglesias (navarro). T.A.: Stuani (32'), Choco Lozano (54'), Douglas Luiz (66'), Granell (70'), Merino (86').

Incidencias

Montilivi (10.170 espectadores). Partido correspondiente a la jornada 25 de la Liga Santander.

Los comienzos nunca fueron fáciles. Ante el Madrid, Eusebio planteó una nueva formación que le fue como anillo al dedo al equipo. Pero no todos los rivales son iguales. Cuando propones incluir otras variantes en el juego siempre se necesita algo de tiempo para que los jugadores se acomoden y terminen de carburar.

Y eso es lo que le pasó al Girona en un partido realmente disputado en el que ninguno de los dos conjuntos supo cómo someter al rival. Quitarse el cartel de peor local de la competición no es nada fácil pero el conjunto de Eusebio se aferró a la corriente positiva del Bernabéu para ir a por todas desde un principio.

Los gerundenses salieron como lobos en el arraque, poniendo la línea defensiva en el centro del campo y asfixiando al rival. Aun así, poco les duró el empeño y tampoco pudieron ser protagonistas con el balón. 

Con un sistema u otro, al Girona se le da mucho mejor salir al contragolpe con la velocidad de Portu. Así, replegó líneas y dejó a la Real Sociedad el mando del encuentro. Ahí el cuadro donostiarra fue creciendo con el paso de los minutos gracias al buen hacer de Merino y Juanmi, un quebradero de cabeza para la zaga catalana por su movilidad.

De hecho, el atacante fue el que tuvo las ocasiones más claras para el cuadro de Alguacil. Mientras, el Girona no pasó por excesivos apuros e incluso se permitió el lujo de acercarse con peligro a la meta de Rulli. Eso, en un partido en el que la guerra se disputó en el centro del campo, es mucho decir.

Lozano fue el que tuvo la ocasión más clara con un disparo que sacó el meta argentino con el talón ofreciéndole tributo al ya retirado Paco Sedano. Pocas ocasiones y posesión disputada no es sinónimos de diversión para un Montilivi que quería y necesitaba fiesta.

Mejoró la segunda

No obstante, la Real no estaba muy por la labor de sucumbir y los de Alguacil apretaron de lo lindo en el arranque de la segunda mitad. Sin ocasiones como tal, el cuadro donostiarra arrinconó a un Girona que esperó su oportunidad. Los minutos de dominio realista se fueron diluyendo y los gerundenses lo pudieron aprovechar. Stuani lideró la reacción pero no supo rematare con contundencia un par de ocasiones de las que dispuso.

Tampoco pudo hacerlo Borja García tras una jugada maradoniana de Pere Pons. El medio se fue de todos y le brindó un balón franco al borde del área que el mediapunta mandó por encima del larguero. Tras esa ocasión clamorosa, el Girona lo siguió intentando pero nadie iba a ser capaz de mover el 0-0. Tablas en Montilivi. La maldición gerundense continúa ante el ogro realista.