Juande Ramos: Del botellazo al liderato

Después de vivir una de las peores experiencias de su vida, Juande Ramos se resarció en lo deportivo dejando a su equipo en lo más alto de Primera.

En poco más de 72 horas, Juande Ramos pasó de la angustia a la euforia. La primera fue extradeportiva. La segunda, deportiva. Angustia por un hecho que nunca debió suceder y euforia por un liderato que ya nadie puede considerar anecdótico, derrocando de esa posición al Barça de Rijkaard. Las dos caras de la moneda para un personaje que vive actualmente su mejor momento profesional.

Y todo, porque el secretario técnico Monchi no sólo tiene ojo para acercar a Sevilla a grandes futbolistas, sino que también apuesta por buenos entrenadores. Joaquín Caparrós había dejado un gran sabor de boca en el club sevillista pero decidió tomar el avión y probar fortuna en La Coruña. El nuevo técnico también se iba a quedar sin Sergio Ramos y Baptista, que se fueron al Real Madrid. Y ese encargado de superar el listón que dejó Caparrós era el manchego. No sólo lo ha superado, sino que lo ha elevado a una altura que esta vez sí que es difícil de superar.

Juande llegaba a Nervión con la vitola de ser un técnico regular, de los que empieza y acaba una temporada con su equipo desde que en la campaña 91-92 se hiciera cargo del Elche B. Sólo tuvo un lunar: su efímero paso por el Espanyol, la temporada 02-03. Unicamente estuvo cinco jornadas en el banquillo blanquiazul y vivió la única destitución de su carrera... aunque los tribunales le dieron posteriormente la razón y ganó una demanda al club por despido improcedente.

El pedroteño no sabía de títulos, pero sí de ascensos. Llevó a Logroñés y Rayo Vallecano a Primera y estuvo a punto de hacer lo propio con el Lleida. Sus equipos siempre suelen acabar por encima de la décima plaza y tan sólo vivió la amargura de un descenso. Fue con el Barça B la temporada 96-97, cuando en el primer equipo blaugrana mandaban Bobby Robson y Jose Mourinho.

PASADO BETICO

La misma afición que ahora le respeta e idolatra no le podía ni ver cinco temporadas atrás. En el currículum de Juande figura su paso por el Betis, al que metió en Europa y en el que vivió una de las experiencias más extrañas de su carrera, aquel día que se personó junto al entonces presidente Manuel Ruiz de Lopera y el ex jugador y técnico Luis del Sol en la fiesta de Halloween que había montado Benjamín.

Al técnico manchego le ha tocado vivir de todo, pero el capítulo de su biografía que nunca le hubiera gustado escribir tuvo que vivirlo en Heliópolis, cuando un energúmeno le asestó un botellazo que ha dado la vuelta al mundo. Pero Juande volvió al trabajo enseguida. Hombre de pocas palabras, suele ofrecer su imagen más seria en público. Un ejemplo: Los periodistas que cubren habitualmente la información del Espanyol nunca olvidarán aquel día que el técnico se marchó en plena rueda de prensa cuando sonó un móvil en la sala, después de que el manchego recomendara en más de una ocasión que se silenciaran los aparatos.

En privado, Juande Ramos es más alegre. Y ahora tiene motivos para ello, sobre todo por un dato: el Sevilla sólo había sido líder de Primera en la jornada 25 en una de las 58 temporadas anteriores en la categoría. Fue en la 45-46, con los 'stukas'. Aquel Sevilla fue campeón de Liga, aunque entonces sólo se disputaron 26 jornadas y ahora se disputan 38. Juande lo sabe. A él siempre le gusta ir paso a paso, pensando siempre en el presente y sin hacer castillos en el aire. Por algo dio al Sevilla sus primeros títulos europeos y ahora aspira a todo: Liga, Copa del Rey y Copa UEFA. La gloria le espera.