La Federación dejaría de percibir 20 millones sin convenio con LaLiga

Luis Rubiales y Javier Tebas

Luis Rubiales y Javier Tebas / EFE

Ramón Fuentes

La RFEF dejaría de percibir cerca de 20 millones de euros sin convenio de coordinación con LaLiga. Sin contar con la aportación actual de los árbitros que supera los 20 millones de euros y que ya está renovada para los próximos cinco años. Ahora mismo todo indica que no habrá convenio. La Liga no se va a sentar con la RFEF sino está el CSD presente y parece muy difícil bajo la dirección actual. Sólo un cambio en el Ministerio del Deporte provocado por las elecciones podría propiciar que esto se produjera

El pasado lunes en el diario SPORT ya os adelantamos el escenario al que nos enfrentamos respecto al convenio de coordinación existente entre la RFEF y LaLiga que finaliza este verano y que ahora mismo está absolutamente parado. Tanto que LaLiga no se va a sentar con la RFEF a retomar las reuniones sino es con la presencia del CSD. Algo que ahora mismo es prácticamente imposible bajo la actual dirección de la institución gubernamental que preside María José Rienda como Secretaria de Estado para el Deporte. A lo que hay que sumar el proceso electoral que se celebra en España el próximo 28 de abril, que podría propiciar un cambio de gobierno en nuestro país. Tanto si se produce o no, según fuentes consultadas por el diario SPORT y siempre en el mejor de los casos, hasta junio no habría un nuevo gobierno y será entonces si, tanto es el actual quien gobierna como no, que decisión adopta respecto al Consejo Superior de Deportes.

Luego parece claro que nunca antes de esa fecha, como muy pronto, podría darse un encuentro entre la RFEF y LaLiga con la presencia del CSD.

Esto nos aboca a un escenario sin convenio de coordinación y donde el fútbol español se regiría por el Real Decreto de Federaciones Deportivas, concretamente a su disposición adicional segunda. En el mismo habla de este escenario donde no habría convenio. Empezando por la elaboración del calendario que sería elaborado por Laliga pero tendría que ser ratificado por la RFEF y, en caso de no hacerlo en dos ocasiones, sería el CSD quien tendría que resolver. En el mismo también se habla de los criterios para participar en la competición, el número de equipos, la determinación de jugadores extracomunitarios así como la existencia de un Comité de designación arbitral encargado de designar los árbitros de los partidos y el resto de aspectos derivados del arbitraje. También esta disposición deja claro que la potestad disciplinaria deportiva de la competición dependerá de la Federación Española de Fútbol.

El CSD da la razón a Laliga en tema de horarios

Pero no sólo eso además, llegado este punto, nos encontraríamos una situación de interinidad donde no se tratan los temas capitales que han dado pie al conflicto: los horarios, el naming de la competición y el balón. Y aquí la situación sería actualmente la siguiente: los horarios acaba de reconocer el CSD en un escrito que son competencia de LaLiga; el naming lo tiene cerrado la Liga con el Banco Santander hasta el final de la temporada 2020-2021. Ampliación que ha efectuado bajo el paraguas del convenio actual que le otorga esta concesión, si bien la RFEF no está nada de acuerdo. Así de hecho se lo ha hecho saber estamento federativo al propio grupo bancario.  

Y luego está la comercialización del balón, otra de las competencias que la RFEF tiene cedidas a LaLiga como establece el punto decimotercero de este mismo apartado VI de cesión de competencias. Será dentro de dos semanas cuando la Liga haga oficial su acuerdo con PUMA rubricado hace ya cerca de ocho meses para que sea el nuevo balón de la liga durante un período que podría incluso llegar a las cinco temporadas.

Dejaría de percibir las partidas de la Copa del Rey

Llegados a esta situación sin convenio, la REFF dejaría de percibir importantes cantidades de dinero procedentes de la Liga y que están recogidos en el actual convenio. Empezando por las cantidades que la Liga abona bajo el modelo actual de Copa del Rey, algo que la RFEF quiere modificar a partir de la próxima temporada. Se trata de casi 4 millones de euros por temporada (3814288) que la Liga abona en dos pagos. Luego está la parte de la contribución de LaLiga a los servicios federativos que suponen 886440 euros anuales además de 6727317 euros en concepto de contraprestación del actual convenio y que está destinado al fútbol base. Además está la partida de las licencias de Primera y Segunda división que implica un pago de 52620 y 23002 euros respectivamente. Luego están las cuotas de los jugadores foráneos fijadas en 8660 euros en Primera y 4858 en Segunda. Por último la Liga abona actualmente cerca de 400000 millones de euros anuales por la opción de jugar los viernes y los lunes. Esto nos lleva a un escenario mínimo de 17 millones de euros que con los incrementos de IPC pueden llegar a los veinte. Según dijo Javier Tebas en un desayuno reciente, son cerca de cincuenta en todos los conceptos el dinero que actualmente la Liga reporta a la RFEF.

En el caso de los árbitros, hasta ahora venía percibiendo anualmente dentro del propio convenio hasta la temporada pasada cerca de 17 millones de euros en concepto de salario, desplazamientos, dietas o cursos de formación. Este pasado verano el CTA- RFEF y la Liga llegaron a un nuevo acuerdo para los próximos cinco años donde se incrementan notable estas cantidades debido a la implantación del VAR. Inicialmente este acuerdo quedaría siempre fuera de un futuro convenio, si bien la RFEF quiere incluirlo en la negociación. Pero estas cantidades no afectarían en caso de no haber convenio.