La conexión instantánea entre Vlahovic y Di María ilusiona a la Juve

El cuadro 'bianconero' goleó al Sassuolo con dos goles del serbio y uno del argentino (3-0)

Pese al resultado final, el público pitó el arranque dubitativo de la 'Vecchia Signora'

Di María y Vlahovic ya celebran goles juntos en la Juventus

Di María y Vlahovic, celebrando un gol / AFP

X. Serrano

La Juventus sigue siendo un equipo imperfecto, con problemas sangrantes para elaborar juego, pero ha sumado un recurso más que prometedor en Ángel Di María para el juego directo que pretende Massimiliano Allegri. El argentino marcó un gol y dio una asistencia en su estreno con la 'Vecchia Signora'. Eléctrico y confiado, levantó al Allianz Stadium con una rabona y se entendió con Dusan Vlahovic, autor de un doblete frente al Sassuolo (3-0).

Juventus-Sassuolo

Serie A

3
0
Alineaciones
Juventus
Perin; Danilo, Bonucci, Bremer, A. Sandro (De Sciglio, 61'); Zakaria, Locatelli (Rovella, 76'), McKennie (Soule, 76'), Di María (Miretti, 66'), Vlahovic y Cuadrado (Kostic, 61').
Sassuolo
Consigli; Muldur (Toljan, 7'), Ayhan, Ferrari, Rogerio; Frattesi (Ceide, 80'), Matheus Henrique, Thorstvedt (Harroui, 80'); Berardi, Defrel (Raspadori, 46') y Kyriakopoulos (Pinamonti, 59').

Pero, a pesar del resultado y el buen sabor de boca final, el conjunto 'neroverdi' desnudó las carencias e inseguridades de la Juve en la primera parte, con una serie de pérdidas que pudieron salirle muy caras, de no ser por los reflejos de Mattia Perin, y provocaron los pitos de la afición local. El gol de Di María lo cambió todo, pero ejemplifica la exigencia que habrá en Turín desde el primer día.

Allegri apostó por un 4-3-3 pensado para morder en la medular y volar en transición, con Zakaria y McKennie flanqueando a Locatelli, obligado a ejercer de pivote ante la falta de alternativas. Arriba, dos puñales como Cuadrado y el debutante Di María para servir al goleador Vlahovic. Bremer, otro de los fichajes estivales, debutó en el eje de la zaga junto a Bonucci.

La Juventus saltó al campo decidida a golpear primero. Tanto es así que en el minuto inaugural, una caída de Alex Sandro en el área pudo haber sido penalti. No lo consideró así el colegiado, para enfado del coliseo 'bianconero'.

Sin embargo, el efervescente arranque turinés se diluyó pronto ante la disciplinada presión del Sassuolo en campo rival. La Juve encadenó tres pérdidas peligrosas en campo propio, y llegaron los nervios. Solo los reflejos de Perin privaron del gol a Defrel en dos claras ocasiones. La grada se impacientaba, los pitos iban a más, cuando llegó el gol 'bianconero'.

Tras una larga posesión en campo rival, Di María enganchó de volea un centro de Cuadrado desde el extremo contrario. El remate del argentino, mordido, sorprendió a Consigli, que se vio superado por la parábola del esférico tras rebotar en el verde. El gol armó de confianza a la Juve, que a la mínima buscaba las carreras del incansable Vlahovic, siempre en movimiento.

El esfuerzo del serbio, que había rematado desviado en dos ocasiones, encontró premio al filo del descanso. Un forcejeo suyo con Ferrari fue castigado como penalti, de forma más que rigurosa, y el propio Vlahovic convirtió la pena máxima con un remate sutil por el centro de la portería.

Con el marcador a favor y un rival obligado a arriesgar, la Juve cedió la iniciativa a la espera de un contraataque que le permitiera liquidar el partido. Así sucedió. Di María dio el primer aviso, con un remate al que le faltó comba para entrar por el palo largo. Acto seguido, el rosarino convirtió en asistencia una pérdida temeraria de Ayhan para que Vlahovic anotara el 3-0 lanzándose al suelo.

Pese al carrusel de cambio en ambos equipos, que posibilitó el debut de Kostic como 'bianconero', el partido quedó visto para sentencia. Sin creérselo demasiado, el Sassuolo llamó con poca convicción a la puerta de Perin, seguro en todo momento. Y en la Juve, Di María tuvo tiempo de levantar al público con un pase de rabona antes de ser despedido con una sonora ovación.