Acuerdo para la profesionalización del arbitraje femenino

José Manuel Franco, Luis Rubiales, Yolanda Parga y Marta Frías Acedo sellan el pacto en el CSD

CSD, RFEF y Liga F llegan a un acuerdo para profesionalizar a las árbitras de la Primera División femenina

Acuerdo histórico CSD-RFEF para la profesionalización del arbitraje femenino

Acuerdo histórico CSD-RFEF para la profesionalización del arbitraje femenino / RFEF

Jordi Delgado

Jordi Delgado

Por fin se ha llegado a un acuerdo histórico entre el Consejo Superior de Deportes, la Real Federación Española de Fútbol y la Liga F para la profesionalización del arbitraje femenino, tras casi una semana de protesta del colectivo, y que desbloquea el parón arbitral.

José Manuel Franco, Luis Rubiales, Yolanda Parga y Marta Frías Acedo han sellado el pacto en el CSD, y la Liga F se podrá volver a reanudar a partir de este fin de semana, con la jornada 2.

Según informó la RFEF, a lo largo de la jornada de este miércoles se produjeron una sucesión de conversaciones entre el CSD y la RFEF que fructificaron en un acuerdo histórico para la profesionalización del estamento arbitral en el fútbol femenino.

"CSD y RFEF refuerzan su apuesta por el fútbol femenino a través de la consolidación de unas partidas presupuestarias que han derivado en un pacto pionero que permitirá el arranque de la Primera División del Fútbol Femenino", dice el comunicado.

En el marco de un acuerdo para seis temporadas, el CSD aportará durante las tres primeras una cantidad de 350.000 euros extras por año que irá destinado a un fondo mutual individualizado del que las árbitras podrán disponer una vez finalizada su carrera profesional.

Además, la RFEF aportará la misma cantidad durante los tres primeros años a la LPFF mediante el Convenio de Coordinación para ser destinados íntegramente a los clubes para hacer frente de los arbitrajes de la competición.

Según las primeras informaciones de varios medios, las cantidades acordadas habrían sido de 25.000 euros anuales para las árbitras principales y 16.000 para las árbitras asistentes, con una vigencia de unos seis años.

Individualmente, las cifras comunicadas por la Liga F con una mejora de su propuesta inicial, pasan de 300 euros a 1.666 euros por partido para la árbitra principal, de 166 a 1.06 euros por partido para las asistentes y de 84 a 250 euros por partido para la cuarta árbitra.

Las árbitras (22 árbitras principales y 32 asistentes), como pedían, tendrán contrato y derechos laborales, y aceptaron las cifras propuestas por el Gobierno.

"Por mucho que algunos quieran hacer creer, la profesionalización no es una llave que abra un cofre de dinero. La profesionalización aporta la posibilidad de que el fútbol femenino pueda ser gestionado de manera independiente por aquellos que verdaderamente creen en él, permitiendo así disponer de las herramientas necesarias para hacerlo crecer", añade el comunicado de la Liga F.