El último Clásico de Jonatan Giráldez

Jonatan Giráldez dirigirá su último Clásico como entrenador del FC Barcelona, con pleno de victorias hasta ahora. Uno de los objetivos antes de dejar el banquillo azulgrana y cruzar el charco es el de sumar un nuevo triunfo ante el Real Madrid, el rival al que más veces se ha enfrentado en estas tres temporadas.

De todos los once Clásicos ganados -el del domigo puede ser el duodécimo-, el vigués, que habló en la rueda de prensa previa al partido, tiene claro con cuál se queda, más allá del de Champions en el Spotify Camp Nou: "Con el de la Supercopa del año pasado. Estuvimos prácticamente una hora con una jugadora menos [Irene Paredes fue expulsada por doble amarilla]".

Explicaba que "a nivel emocional pudimos trabajar cosas que nunca habíamos podido trabajar; conseguimos marcar dos goles más en la prórroga y eso fue un chute importante de adrenalina, de ilusión, de confianza" y que supuso un "punto de inflexión en un año en el que ganamos la Champions".

Un Madrid en "un gran momento"

Giráldez, que siempre que analiza al Real Madrid antes de los Clásicos destaca las distintas versiones que ha ofrecido el conjunto blanco, espera a un rival "que ahora está en un gran momento, que ha cambiado cosas, que tiene otra pareja de centrales, con una Linda Caicedo con distintos roles y con varias jugadoras que asumen los goles y las asistencias".

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Apunta que en los dos precedentes de esta temporada, en el partido de Liga en Montjuïc y en el de la Supercopa en Leganés, el contexto de las de Toril era diferente. "Olga no estaba al cien por cien, Bruun no estaba disponible... Ahora están en otro punto. Con casi todas disponibles y en un gran momento de forma".

Golpe sobre la mesa

Si gana el domingo, el Barça se pondrá con doce puntos de ventaja sobre el Madrid, segundo en la clasificación, a falta de nueve jornadas. "Sería una distancia muy grande, desde el punto de vista de las matemáticas. No nos podemos aventurar, tenemos que pensar en hacer un buen partido y merecer la victoria", dice Giráldez.

Y el Clásico se juega en medio de una eliminatoria de los cuartos de final de la Champions contra el Brann, que no quedó sentenciada en Bergen (1-2 para las azulgranas). "Siempre nos condiciona. Yo voy partido a partido y ahora pienso en el Madrid, pero tenemos la eliminatoria abierta, no podemos olvidar que tenemos un partido muy importante la semana que viene y la prioridad es clasificarnos. Pero ahora tenemos una oportunidad inmejorable para dar un golpe en la Liga"