Bruna Vilamala: "El fútbol ha cambiado el sentido que tenía para mí"

Tiene solo 18 años pero nadie lo diría escuchando su discurso. Superar una lesión de cruzados hizo mucho más fuerte a esta joven futbolista a la que le cambió la vida hace poco más de un año, cuando debutó con el primer equipo del Barça. Tras el parón obligado por el coronavirus, Bruna ha ido haciéndose un hueco en el día a día de un equipo que está haciendo historia. Con tres goles en cinco partidos en liga, el último como titular, no hablamos ya de una promesa de futuro sino de una realidad más pronto que tarde.

¿Cómo empezó Bruna Vilamala a jugar a fútbol?

Como supongo que han hecho muchas niñas, empecé en el colegio, jugando con mis amigos en el patio. No quería columpios o jugar a otra cosa. Iba siempre con un balón encima. Un día, en casa, les dije a mis padres que quería apuntarme a fútbol, porque además mi primo, que iba a mi clase, iba a hacerlo. Así que mis padres me apuntaron -ellos pensaron que iba a durar dos días porque no era algo muy habitual aún- y empecé a jugar en el equipo que está al lado de mi pueblo, en Sant Vicenç de Torelló. A partir de ahí empecé a jugar, me gustaba, se me daba bien, pasé por varias categorías de la catalana, entré en el Barça y hasta aquí hemos llegado (ríe).

Quizá un camino que a día de hoy vemos como más normal, pero que no han podido seguir otras compañeras de vestuario...

Obviamente sabemos que nosotras hemos pillado una época muy buena para empezar a jugar y que hemos tenido mucha suerte. Compañeras como Melanie Serrano nos cuentan que, incluso estando en el Barça, todo era mucho más complicado. O hablando con las pioneras que empezaron hace 50 años ves que aquello era una barbaridad. Nosotras estamos viviendo una época en la que se ha profesionalizado el primer equipo y en la que tenemos unas condiciones muy buenas, pero estoy segura que si las que nos preceden no hubieran luchado por sus derechos y por llegar hasta lo que tenemos hoy en día, no estaríamos donde estamos. Es un placer para nosotras cumplir nuestro sueño de llegar al primer equipo y poder hacerlo además en estas condiciones, de la misma manera que también estamos trabajando para que el futuro sea aún mejor y que se aprovechen de ello las generaciones del futuro.

Para quien no haya podido verte mucho, ¿cómo te defines como futbolista?

Soy una futbolista muy trabajadora y muy exigente conmigo misma, igual que creo que somos todas las que estamos aquí. No he tenido el camino más fácil para llegar hasta aquí porque he sufrido muchas lesiones, pero creo que eso me ha hecho más fuerte. A nivel futbolístico, pues alguien a la que le gusta tener y tocar bastante el balón… y con buena definición

Llevas tres goles en apenas cinco partidos en la Primera Iberdrola 

Ya, ya, jaja. No me lo imaginaba para nada. Sí que es verdad que siempre he metido goles, pero al pasar a Primera, con lo complicado que es, he podido tener esa suerte de marcar en los pocos partidos que he jugado. 

Ha sido un año raro por todo, ¿pero qué balance haces de lo que te ha pasado desde que debutaste con el primer equipo en febrero de 2020?

En enero, un mes antes de debutar, era una Bruna que acababa de salir de una lesión de cruzados y lo único que quería era volver a disfrutar del fútbol. Y luego fue todo muy rápido. En una misma semana me suben con el primer equipo y debuto. Fue como un ‘boom’. Yo estaba muy bien con el ‘B’ el año pasado: teniendo buenos minutos, jugando, disfrutando... pero sí que es verdad que después del debut me mentalicé. Sabía que tenía que trabajar duro durante la cuarentena y seguir mejorando para todo lo que podía venir. Que si el primer equipo necesitaba que subiera, pudiera hacerlo en las mejores condiciones. Luego, cuando ya me dijeron que esta temporada iba a estar en dinámica del primer equipo ya vino el cambio más grande. El fútbol ha cambiado el sentido que tenía para mí. Entrenar una semana con estas jugadoras significa mejorar mucho en todo. Imagínate todos los meses que llevo ya. Es aprender diariamente de lo que hacen y de cómo lo hacen. Ahora lo vivo de otra forma: enfocar objetivos, ser más ambiciosa, confiar más en mí… creo que he cambiado muchísimo, aunque siempre teniendo claro que todo parte del trabajo, la intensidad y la constancia.

Desde fuera da la sensación que el equipo os ha acogido muy bien a las jóvenes

Sí, nos tratan super bien. En realidad, muchas de ellas han pasado por lo mismo y se nota: saben lo que es entrar a un primer equipo, con los nervios y presión que eso supone y nos han ayudado y facilitado mucho la entrada. Cuando salimos al campo siempre nos animan un montón y se alegran de que podamos tener minutos. Quizá si hubiera alguna mala cara o algún gesto raro sí que podríamos haber sentido más presión, con la angustia de entrar al campo por alguien que se tome el cambio a disgusto, pero es al contrario y eso te hace estar mucho más cómoda.

 ¿Qué esperas ahora del futuro? ¿Qué objetivos te marcas?

Mi sueño siempre había sido jugar en el Barça desde que supe de la existencia de un Barça femenino. Yo soy culé desde muy pequeña y las condiciones que tengo ahora mismo son espectaculares, teniendo además cerca a mi familia. Yo solo espero que la Bruna del futuro siga disfrutando de esto y tenga fortuna con las lesiones. Voy a seguir trabajando para aprender, para tener más minutos, para marcar más goles y seguir feliz aquí. 

Hablas de tu familia y sé que han sido un pilar para ti. Me han chivado que se emocionaron con tu debut como titular y con tu gol ante el Levante en el Johan

Cuando Lluís me dijo que iba a ser titular contra el Levante se lo dije rápidamente a mis padres y se pusieron muy contentos, me felicitaron y me dijeron que estuviera tranquila. Para mí esto también es un regalo para ellos porque me han acompañado siempre. Como te he dicho, he tenido bastantes lesiones y mis padres y mi hermana han estado siempre ahí, así que para mí fue muy especial que estuvieran allí. En el partido salió todo redondo y sé que se emocionaron y a mí me alegra. Porque sé que están orgullosos del trabajo que estoy haciendo y yo muy orgullosa de poderles haber regalado esto.

Entráis en la recta final de la temporada con opciones a ganarlo todo…

Nuestro primer objetivo es seguir peleando por la liga. Encajar los menos goles posibles y seguir ganando partidos y alargando la racha de imbatibilidad, de manera que podamos centrarnos también en la Champions, que la llevamos trabajando muchísimo y ojalá sea este el año. Las semifinales las pelearemos sea quien sea el rival

¿Tenéis alguna preferencia?

La verdad es que no. Con el Olympique tenemos el precedente de la final y quizá están ahí esas ganas de revancha, pero sabemos que el PSG está en muy buena forma y el que pase va a ser un rival muy duro. Al final, para ganar tienes que ser mejor que todos los demás, sea quien sea el rival.

A nivel de cansancio, ¿cómo llegáis a la recta final de temporada? 

Venimos de un calendario muy exigente y ahora, tras el parón, volveremos a entrar en una etapa con otro calendario muy exigente. Yo creo que estamos preparadas y que lo hemos ido demostrando estas últimas semanas. Juegue quien juegue, responde y el equipo está ganando y jugando bien, con el mismo estilo e intensidad. Las rotaciones van a ser muy importantes por lo que viene, porque nuestra prioridad es ganarlo todo, pero sí que creo que en Champions va a haber un desgaste muy grande. Así que tendremos que estar preparadas las que tenemos menos minutos para jugar los partidos que nos dé Lluís y que las titulares puedan descansar cuando lo necesiten. 

Promete ser apasionante...

A final de temporada siempre llegan los partidos más bonitos de jugar, pero también llega la etapa más dura y exigente, viniendo además del cansancio acumulado de toda la temporada. Jugar miércoles-sábado de contínuo supone un reto a nivel físico, pero también a nivel mental y habrá que saber gestionarlo.