Kane derrumba la muralla del Dinamo Zagreb

La pegada de Harry Kane bastó al Tottenham para encarrilar el acceso a los cuartos de final de la Europa League. El doblete del inglés plasmó la superioridad londinense ante un Dinamo Zagreb ultradefensivo (2-0). Sin hacer demasiado ruido, el emblema 'spur' ya suma 26 goles este curso, superando su mejor marca, los 24 de las dos temporadas anteriores.

Tottenham - Dinamo Zagreb

Europa League

TOT

2

0

DZG

Alineaciones

Tottenham
Lloris; Aurier, Sánchez, Dier, Davies; Sissoko, Ndombele (Hojbjerg, 72'); Lamela (Bale, 65'), Alli (Lucas, 65'), Son (Bergwijn, 65'); Kane (Carlos Vinicius, 84').

Dinamo Zagreb
Livakovic; Ristovski, Lauritsen, Theophile-Catherine, Leovac; Majer (Kastrati, 64'), Jakic, Ademi (Franjic, 90), Ivanusec; Petkovic (Gavranovic, 78') y Orsic (Atiemwen, 65').

Goles

1-0 M. 25 Kane. 2-0 M. 70 Kane.

Árbitro

Serdar Gözübüyük (Países Bajos). T.A.: Dier (45'), Sánchez (79'), Hojbjerg (85') / Ademi (68'), Ivanusec (77'), Ristovski (88').

Incidencias

Partido disputado a puerta cerrada en el Tottenham Stadium correspondiente a la ida de los octavos de final de la Europa League.

Como era de esperar, el cuadro londinense mandó en el partido desde el inicio. Poco importó que Mourinho reservara a siete de los titulares de cara al derbi ante el Arsenal de este domingo, Gareth Bale incluido. Los 'spurs' llegaban a la cita en dinámica ascendente tras vencer sus últimos cuatro partidos y exhibieron en todo momento su fortaleza mental, sin perder los papeles ante un rival muy ordenado en defensa.

Porque el Dinamo renunció al balón desde el pitido inicial. El cuadro croata fiaba sus opciones al contraataque. Una fórmula que hasta el momento le había funcionado, pues llegaba a la cita invicto en la competición. Por no hablar de su racha de ocho victorias consecutivas. Pero no se habían topado, claro está, con ningún oponente de semejante entidad.

El Tottenham dominó un primer acto parejo y de pocas ocasiones. Los 'spurs' merodearon constantemente el área croata, con un Son muy participativo en el costado izquierdo, pero sin conectar con un Kane superado en número por los defensores. El duelo empezó a decantarse en una acción asilada. Lamela recibió en la frontal, superó a su par con un amago y disparó con el exterior de la zurda al palo. Siempre atento, Kane mandó el rebote a la red.

Nada cambió tras el receso. El Tottenham monopolizaba el curo (por encima del 70%) y el Dinamo se concentraba en no encajar más goles. El cuadro londinense era incapaz de generar peligro y, de hecho, el conjunto balcánico pudo darle un disgusto tras una pérdida de Aurier. Para su fortuna, el tiro de Petkovic fue calamitoso. Intranquilo, Mourinho cambió de una tacada a los tres acompañantes de Kane, dando entrada a Bale.

El efecto fue inmediato. El galés puso un centro con el exterior hacia Bergwijn, que exigió a Livakovic con el interior e la bota. Nada pudo hacer el arquero cuando, a renglón seguido, Kane cazó un balón suelto en el área. En una exhibición de sangre fría, el inglés pisó el cuero, amagó y cruzó su disparo a la red. Un tanto que deja al Tottenham con pie y medio en los cuartos de final.