Final Four Euroleague Milán 2014

CSKA Moscú: La enésima reválida

El equipo ruso es uno de los equipos habituales en la Final Four pero tendrá ante sí una nueva prueba de carácter para demostrar que están preparados para ser campeones

Sergio Vera

El CSKA Moscú vuelve a la carga y lo hace como siempre: con una plantilla que impone algo más que respeto. El proyecto del conjunto ruso sigue reuniendo a varios de los mejores jugadores del baloncesto europeo pero, a diferencia de años anteriores, en esta ocasión no parte como el gran favorito sino que comparte cartel con Barça y Madrid, con permiso del Maccabi Tel Aviv.

Es indudable la calidad y capacidad del equipo dirigido por Ettore Messina para poder conquistar una Euroleague que se les resiste desde 2008 pero quizás ha sido el carácter en los momentos decisivos lo que les haya apeado del triunfo final en las últimas ediciones a las que aterrizaban como grandes aspirantes y acaban marchándose como gran decepción.

La temporada pasada cayeron contra Olympiacos en semifinales en un encuentro en el que fueron una caricatura del equipo que había asombrado en la competición justo un año después de haberse dejado remontar - también ante los griegos - en la final disputada en Estambul'2012 en una de las finales más rocambolescas de la historia decidida con el épico lanzamiento sobre la bocina de Printezis.

En esta ocasión, el CSKA aterriza de nuevo tras completar un buen torneo. Fue segundo en la fase regular por detrás del FC Barcelona - ante el que cayeron en las dos ocasiones - y consiguió finalizar líder en el TOP16 por delante del Madrid con un balance de 12 victorias y 2 derrotas. El Playoff de cuartos de final ante el Panathinaikos volvió a ser una clara muestra de la historia reciente de este equipo. Sólido en Moscú e incierto lejos de Rusia. Pese al 2-0 con el que se presentaron en el OAKA, los griegos fueron capaces de empatar la serie y forzar el desempate que, por suerte para Ettore Messina y los suyos, cayó del lado ruso.

El equipo de Moscú vuelve a presentar prácticamente el bloque de la temporada pasada solo apuntalado con algunas incorporaciones de renombre. Jeremy Pargo, Vitaly Fridzon y Kyle Hines fueron los grandes fichajes de un proyecto que volvió a confiar en los Kaun, Krstic, Teodosic, Weems y, por supuesto, el omnipresente Victor Khryapa.

La gran duda está en saber qué cara mostrará el equipo en la cita de Milan. Su primer test será ante el Maccabi, un equipo al que apabullaron en Moscú por 100-65 y al que también vencieron en Israel por 76-81. ¿Habrá revancha hebrea o los moscovitas volverán a una final europea? Todo por decidir.