El coraje del Real Madrid se impuso en la prórroga a un Barça sin garra

El conjunto azulgrana dominó 35 minutos pero Llull, con 15 puntos en el cuarto final, le dio la vuelta y Dzanan Musa acabó por sentenciar en el tiempo extra (91-86)

El conjunto blanco puso mucho más coraje y ganas de victoria cuando se decidía el duelo ante un Barça que se encogió en los momentos decisivos del partido

Satoransky, en una acción del primer cuarto ante el Madrid

Satoransky, en una acción del primer cuarto ante el Madrid / EFE

Ramon Palomar

Ramon Palomar

Saras Jasikevicius apuntó en la previa que el partido se lo llevaría el equipo que pusiera más deseo y ganas de victoria y ese fue el Madrid. A pesar de dominar durante tres cuartos, los blancos aguantaron agazapados con Deck (23), Llull en el tramo final (19) y sentenció Musa (18) para llevarse la victoria por 91-86 y seguir liderando la Euroliga.

MAD-FCB

Euroliga

91
86
Alineaciones
Real Madrid, 91
(16+16+18+23+18): Hanga (0), Hezonja (7), Musa (18), Yabusele (4). Tavares (10)- cinco inicial-, Williams-Goss (0), Causeur (0), Rudy (6), Sergio Rodríguez (4), Deck (23),Poirier (0), Llull (19).
Barça, 86
(20+19+20+14+13): Satoransky (12), Laprovittola (8), Kalinic (8), Mirotic (17), Vesely (12)- cinco inicial-, Da Silva (0), Sanli (6), Abrines (9), Higgins (10), Jokubaitis (2), Nnaji (2).

El Barça mantuvo rentas cómodas durante 35 minutos pero cuando el partido se endureció ante el arreón del Madrid en los minutos finales, no hubo respuesta y dejó que los blancos creyeran en el triunfo en la prórroga y que les mantiene al frente de la Euroliga y el Barça cede en esa primera plaza.

El Barça entró en el partido mucho mejor que los blancos. Con el equipo habitual de Saras y Vesely de cinco, los azulgranas encontraron con facilidad el aro madridista que les dio las primeras ventajas ante los nervios del equipo de Chus Mateo (2-9).

Dinámica azulgrana

El técnico blanco tuvo que parar el partido en apenas tres minutos porque no le salía nada en ataque, a diferencia de un Barça que se apoyaba en Vesely para fáciles canastas. La dinámica continuó de azulgrana con triple de Mirotic.

Un nuevo triple de Laprovittola daba la máxima azulgrana (6-18) que llevaba el ritmo ante los intentes de Tavares, Musa y Deck de romper esa dinámica. El Madrid, con más corazón que juego, liderados por el argentino, lograba un parcial de 7-0 que les acercaba al final del primer cuarto (16-60). Una renta demasiado corta para los azulgrana que dominó esos primeros 10 minutos con claridad menos en el electrónico.

Saras daba entrada a Jokubaitis junto a Abrines, Da Silva y Sanli para tratar de mantener el control del duelo. El Madrid subía la intensidad pero las diferencias se mantenían para el Barça tras dos buenos triples de Abrines (21-30).

Los pívots, cargados de faltas

La peor noticia eran las faltas personales. Sanli se carcaba con tres faltas y Vesely tenía que volver al partido. Aunque no por mucho tiempo. El checo cometía también la tercera y obligaba a entrar al joven Nnaji al dejar fuera a Tobey.

Vesely y Tavares luchan por un balón

Vesely y Tavares luchan por un balón / EFE

El Madrid tiró de nuevo de garra más que de juego y un triple al límite de la posesión de Rudy Fernández, acercó a los blancos a solo cuatro puntos (26-30). El mallorquín encendía el Wi Zink Center pidiendo el apoyo del público para darle la vuelta al duelo.

Una técnica a Deck por protestar su tercera falta, permitió al Barça rearmarse, con Nnaji tratando de frenar a Tavares, el jugador a anular para salir con éxito de la pista madrileña.

El Madrid se acerca

Los de Chus Mateo lo intentaron de nuevo y llegaron a acercarse a solo tres puntos tras canasta de Eddy Tavares (30-33). Aunque el Barça mantuvo el tipo tras tiempo muerto de Saras y aparecieron los triples de Satoransky y Laprovittola para coger aire y llegar al descanso en control pero todo abierto de cara a la segunda mitad (32-39).

Buen inicio azulgrana tras el paso por los vestuarios, que le llevó a irse de 10 (34-44). Aunque una cierta complacencia y errores en el pase en ataque permitió al Madrid recuperar rápidamente el marcador para acercarse a solo dos puntos (42-44).

Jasikevicius paró el partido, consciente de que el duelo se movía en aguas blancas, y la reacción fue inmediata gracias a dos triples consecutivos de Kalinic, para abrir la renta a 8 (42-50). Primer momento crítico salvado.

El Madrid no logra ponerse delante

Los blancos se movían por arreones, pero no lograba ponerse por delante. Un triple de Satoransky y canasta de Mirotic, recuperaba la renta de 10 (45-55) para dejarla en unos buenos nueve puntos al final del tercer cuarto con un Barça sólido (50-59).

Kalinic lucha por un balón junto a Sergio Rodríguez

Kalinic lucha por un balón junto a Sergio Rodríguez / EFE

En el cuarto final, el Madrid se lanzó a por el partido con Sergio Llull como catalizador de la reacción blanca. Y es que el menorquín, con 15 puntos en el último parcial, metió a los blancos en el partido e incluso les situó por delante tras triple del base (69-67).

En ese momento de locura, apareció Higgins para dar calma al equipo azulgrana y cinco puntos del estadounidense, devolvieron a los de Saras al partido. En los instantes finales, Llull perdió un balón y el Barça no pudo anotar a dos segundos del final. El partido, a la prórroga (73-73).

Dominio blanco en la prórroga

En el tiempo extra, el protagonismo fue para Dzanan Musa que relanzó a los blancos con nueve puntos al inicio que dio mecha a su equipo y que llegó a una máxima de 9 tras triple de Hezonja (87-78).

El Barça, trató de volver al partido, pero cuando se acercó, los tiros libres acabaron por sentenciar y el Madrid se llevó el triunfo porque fue el equipo que más lo quiso (91-86)