El Barça necesitará el mejor Cory Higgins ante su ex equipo

El Barça visita este jueves al CSKA en un partido muy importante para las aspiraciones del Barça de meterse entre los cuatro primeros, y uno de los jugadores que vivirá el duelo de manera especial es el estadounidense, Cory Higgins.

El ahora escolta del Barça jugó cuatro temporadas en el equipo moscovita, logrando dos Euroligas, en las ediciones del 2016 y 2019, y ahora, después de dar un nuevo rumbo a su carrera con el Barça, quiere ganarla en su primer año de azulgrana.

Higgins se convirtió este verano en uno de los fichajes de relumbrón del equipo de Pesic, y el jugador ha rendido de manera intermitente, con lesiones de por medio, que no le ha permitido ser una fuerza ofensiva regular con el equipo.

Buenos porcentajes iniciales

El estadounidense de 30 años y 1,91 tuvo un buen inicio en la Euroliga, con buenos porcentajes en las primeras nueve jornadas de la máxima competición europea, destacando su mejor actuación en la pista del Zalgiris Kaunas, donde logró 27 puntos y 33 de valoración.

En un buen momento, le siguió otra gran actuación en casa ante el Fenerbahçe, con 22 puntos y la siguiente, con 15 puntos ante el Maccabi. El Barça le necesita en la aportación ofensiva, ya que se trata de un jugador muy incisivo, buscando buenas penetraciones, o lanzando con bastante efectividad tanto en tiros de dos (45,8%) y en el triple (41,8%).

Ante el Panathinaikos, en un partido importante en el OAKA, el Barça se llevó el triunfo con muy buena aportación ofensiva, de 17 puntos. Pesic no pudo contar con él en tres jornadas consecutivas, de la 22 a la 24 –que el Barça saldó con victorias-, debido a un esguince de tobillo-, aunque su vuelta ante el PAO no puso ser más efectiva.

Prueba de fuego en Moscú

Ahora le llega otra prueba de fuego ante su ex equipo y seguramente querrá dar lo mejor de sí ante sus ex compañeros, en un duelo que se antoja determinante para la suerte azulgrana de cara a estar entre los cuatro primeros de la competición y disputar el play-off con ventaja de pista.

Y es que el Barça le saca dos victorias al CSKA, por lo que hipotético un triunfo en suelo moscovita abriría la brecha entre ambos conjuntos a tres victorias, y dejaría al equipo ruso en una difícil situación de meterse entre los cuatro primeros.

Pero una victoria rusa, les acercaría a un solo triunfo del Barça y con todas las opciones abiertas. En el partido del Palau, el CSKA apalizó a los de Pesic, en el peor partido de la temporada (67-96) y con un mal partido de Higgins (4 puntos).

Ahora tiene la oportunidad de resarcirse de aquel mal recuerdo en el Palau, brillando en la pista rusa, cosa que acercará seguro al Barça a un triunfo que dejaría a los azulgrana clasificados prácticamente entre los ocho mejores a ocho jornadas del final.