La rescisión del contrato de Quique no será fácil

El club blanquiazul iniciará en los próximos días las rescisiones de contrato de Quique Sánchez Flores –más sus cinco ayudantes– y la de Jordi Lardín, tras el cese de ambos la pasada semana antes de viajar a Montilivi para enfrentarse al Girona.

Serán dos negociaciones distintas. Mientras la del ya exdirector deportivo se intuye que debería ser rápida, la del entrenador se perfila como mucho más complicada y no puede, incluso, descartarse que acabe en los juzgados.

jordi lardín

El acuerdo con el exdirector deportivo no debería crear demasiados problemas. Las relaciones entre Jordi Lardín y el club siguen intactas y en su contrato las condiciones están muy claras. El único problema que podría aparecer en todo el asunto sería el estado de la tesorería para asumir ahora un gasto extraordinario.

Las negociaciones como tal todavía no han arrancado, aunque si han habido ya alguna conversación entre ambas partes. La salida de Lardín no debería ser, repetimos, un problema insalvable.

Quique Sánchez Flores

El apartado con el entrenador y sus ayudantes se perfilan como muy distinto. En el club ya se ha puesto en ‘marcha el ventilador’ y se filtran algunas razones de la decisión tomada al margen de la versión oficial. Se apunta ahora que Quique, por ejemplo, no se concentraba con el equipo para los partidos de casa, algo que hizo desde que llegó y entonces no era ningún problema.

El ‘caballo de batalla’ estará en el contrato. Desde el club se asegura que los cinco ayudantes (Giráldez, Oliva, Díaz, García y Gallardo) solo tienen contrato hasta final de temporada y que el próximo año no estaba garantizado. En este caso, sin duda, sería un acierto de los servicios jurídicos del club que llevaron el peso de la negociación a nivel documental. Los cinco técnicos solo tendría derecho a cobrar hasta el 30 de junio. El ahorro sería importante.

La negociación del despido de Quique estará asesorada por el despacho del vicepresidente Adolf Rousaud, que ya está perfilando la estrategia a seguir. La intención es no pagarle la totalidad del próximo año de contrato. El entrenador ha dejado el caso en manos de su asesor, Ginés Carvajal que, recordemos, ya era el agente de Juande Ramos.

En estos momentos no hay que descartar, ni mucho menos, que el caso acabe en un tribunal. Ya ocurrió con el despido de Juande.