Kilian Jornet: "El hombre es más cruel que la naturaleza"

Lantang’ es la nueva película documental que presenta Kilian Jornet tras tener que suspender su reto de subir al Everest a causa del terremoto de debastó el Nepal justo dos días antes de partir a su nueva aventura de ‘Summits of My Life’. <strong>Kilian decidió viajar igualmente para intentar ayudar a los damnificados a reconstruir sus vidas</strong>. Es la cara más solidaria del atleta catalán.

¿Qué descubriremos en el documental  ‘Langtang’?

“Para la gente que está acostumbrada a ver mis películas esta es totalmente diferente. Normalmente son de acción, donde pueden verme a mi corriendo por las montañas. Esta película es un diario de viaje. 

¿Qué Nepal encontrasteis? 

Una situación completamente devastadora. Esta película explica lo que encontramos y lo que pudimos hacer en temas de ayudas, de rescate, de identificación y de primeros auxilios para llevar comida a algunos pueblos. Por un lado muestra esto y por el otro esta fuerza del pueblo nepalí de tirar para adelante pese a situaciones muy difíciles y ver la vida con cierto optimismo y de ser muy fuertes para tirar para adelante.

Tu que admiras la naturaleza, como te quedas cuando ocurren estas desgracias como el terremoto en el Valle de Langtang.

La naturaleza es cruel, pero esto forma parte de ella. Más cruel es el hombre. Debemos tener muy claro que no podemos luchar contra la naturaleza y en situaciones así es cuando te das cuenta de ello. Aunque nos pensemos que somos muy fuertes, la naturaleza lo es mucho más.

¿Has descubierto un nuevo Kilian en este viaje?

No, son cosas que el cuerpo te pide hacer cuando te encuentras en situaciones de este tipo. No girar la espalda, al contrario. El alpinismo o la montaña es siempre un reto deportivo, pero desde el momento en el que imaginas un reto, el camino engloba viajar, conocer gente, conocer culturas pero también si hay un problema intentar ayudar. Igual que cuando tienes un problema técnico o físico debes entrenar para superarlo, si hay un problema como un terremoto debes intentar ayudar para que puedan salir adelante.

¿Viajar por el mundo te hace ser más solidario?

Te hace ver otras realidades. Hace que te des cuenta de que la realidad es algo que depende del ángulo. Tu ves las cosas de una manera desde aquí y viajas a otro país y allí se ven de otra manera y no por ello son falsas. Hay muchas verdades diferentes. 

¿No sabemos lo que tenemos?

No lo sabemos o no le damos el valor que tiene. Hemos hecho del lujo una necesidad. No nos damos cuenta del lujo que es dar la vuelta a un grifo y que salga agua, o coger un coche y encontrar una carretera que te lleve a un sitio. No pensamos que todo esto son cosas que no están en todos los sitios. Nos pensamos que si no tienes móvil, o un cargador, o wifi es un drama y, evidentemente, no lo es.

¿Qué te impactó más cuando llegaste a Nepal?

Para mí lo más impactante del Nepal fue volver aquí. Es cuando ves que de pequeños problemas hacemos montañas y damos mucha importancia a cosas que no la tienen. En Nepal por ejemplo la relación con la muerte es muy diferente que aquí, por la religión, por la cultura que tienen, el día a día, el ayudarse los unos a los otros es muy diferente al de aquí. Aquí cuando alguien hace algo siempre espera algo de vuelta, allí esto no existe y ves que cada realidad es diferente.

¿Cómo viven allí la muerte?

Me sorprendió que la gente estaba tocada pero no era un drama. Ellos tienen claro que la muerte forma parte de la vida.

Es algo tan sencillo y cuánto nos cuesta aceptar?

Sí, porque todos nos tenemos que morir. De esto no se escapa nadie.

¿Las personas somos solidarias solo puntualmente y después nos olvidamos?

Sí, nos pensamos que por poner un ‘like’ a una foto de un niño de África somos solidarios, y después del ‘like’ ¿qué has hecho para este niño de África? Es como no coger a uno que hace autostop. Al final ayudar es esto, desde un chaval que está haciendo autostop hasta a gente de otro país que lo está pasando mal. También el día a día a nivel ecológico, producir y pensar a nivel más global. Acciones como ‘el gran recapte’ o la Marató de TV3, ayudan mucho pero tal vez si piensas más en las acciones del día a día y en las cosas que haces la ayuda puede llegar más lejos.

¿Va cambiando Kilian Jornet con el paso de los años?

Si, como todo el mundo. Cada cosa que ves te cambia. Te hace ver las cosas de una manera diferente y se va cambiando como persona.

Este año optaste por hacer menos carreras en la temporada de trailrunning. Solo seis importantes. ¿Por qué?

En primer lugar porque iba al Everest y ello significaba estar dos meses de verano fuera. También es cierto que llevaba quince años haciendo muchas carreras, unas 50 al año entre las de esquí de montaña y corriendo y llevaba un ritmo muy alto de competición. Este año hice seis carreras importantes que para mí son muy pocas, pero me dio tiempo para hacer otras cosas que realmente me motivaron mucho.

Igual Kilian Jornet se está haciendo mayor...

(Risas) Bueno, todos nos hacemos mayores. Esto tampoco lo podemos controlar. Pero más que nada al final debemos encontrar motivación en cosas diferentes. He tenido la suerte de haber conseguido muchos objetivos que me había puesto tanto en carreras de montaña como de esquí de montaña y al final la motivación no es la misma para repetir la misma carrera.