¿Cómo ahorrar en la factura de la luz?

Los españoles gastamos de media 56,3 euros al mes en la factura de la luz y 40,1 euros en la factura del gas, según datos ofrecidos por el Panel de Hogares de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia. Y esto supone un gasto anual de 675 euros en electricidad y 481,2 en gas. Los precios de estos servicios están determinados por las distintas compañías eléctricas y de gas, pero los consumidores podemos aplicar unos cuantos trucos para ahorrar en estas facturas. Cuatro de los más importantes están recogidos en la web de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) de España. ¿Pero cuáles son exactamente?

El primero de estos trucos consiste en ajustar la potencia eléctrica contratada para ahorrar energía. Y, en ese sentido, desde la OCU defienden que "si en tu vivienda nunca han saltado los plomos, ni siquiera cuando pones a la vez la lavadora, el horno y el lavaplatos, puede que tengas margen para contratar menos potencia de la que estás pagando". Esto es muy importante. Después de todo, cada 1,15 kilovatios de potencia resulta en cincuenta euros al año. Uno de los principales problemas a la hora de controlar el gasto en electricidad es el desconocimiento del propio servicio contratado. Debemos ser proactivos y estar al tanto.

Del mismo modo, una buena manera de ahorrar dinero en estos suministros pasa por contratar una tarifa con discriminación horaria. Especialmente "si eres capaz de concentrar al menos el 30% de la electricidad que consumes en horario valle", que abarca desde las diez de la noche hasta las doce del mediodía durante los meses de invierno y de las once de la noche a las una de la tarde durante los meses de verano. Gracias al horario discriminado, los consumidores pueden ahorrar hasta ochenta euros anuales, tal y como subrayan los especialistas de la Organización de Consumidores y Usuarios de nuestro país.

En tercer lugar, otro truco complementario consiste en acabar con el consumo silencioso de los aparatos en stand-by, es decir, aquellos que están apagados pero encendidos al mismo tiempo. En palabras de la OCU  debemos "apagar todo lo que se queda en stand-by (televisores, ordenadores, equipos de música...)" tras su utilización para poder "ahorrar un 10% de todo lo que consumes". En términos anuales, podría suponer un ahorro de aproximadamente cincuenta euros. En cuarto lugar, debemos mantener en un óptimo estado la caldera y tener en cuenta que "cada grado de más supone un incremento del 7% en el consumo".

Además, desde el portal especializado Tarifaluzhora proporcionan otros trucos adicionales muy útiles. Uno  muy sencillo supone comprar electrodomésticos marcados como eficientes en la etiqueta energética y mantenerlos en buenas condiciones. También nos ayudará a ahorrar el emplear lavados fríos en la lavadora, el aprovechar el calor residual de la vitrocerámica y el horno para terminar de cocinar, el utilizar bombillas LED o el aprovechar los "diferentes mecanismos que nos permiten tener un mayor control sobre nuestros electrodomésticos" como los enchufes inteligentes o los termoestatos.