El Tottenham de 'Mou' remonta y ya está en octavos

El Tottenham remonta el encuentro ante el Olympiacos y ya está en octavos

El Tottenham remonta el encuentro ante el Olympiacos y ya está en octavos / Mediapro

Albert Gracia

Creía Mourinho que su regreso a la Champions iba a ser un desfile por una alfombra roja llena de pétalos. Un homenaje a su carrera europea. Pero el Olympiacos no estaba para muchas historias. Los griegos, pasionales como pocos, estaban preparados para amargar la noche a Mou.

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Champions League

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Alineaciones
Tottenham
Gazzaniga; Aurier, Davinson, Alderweireld, Rose; Dier (Eriksen, 29'), Winks; Lucas (Sissoko, 61'), Dele Alli (Ndombélé, 83'), Son; Kane.
Olympiacos
José Sá; Elabdellaoui, Semedo, Meriah, Tsimikas; Camara, Guilherme, Bouchalakis (Valbuena, 74'); Podence (Randjelovic, 78'), El Arabi (Guerrero, 85') y Masouras.

Lo tenía todo bien pensado: un golito de El Arabi para comenzar y otro en jugada de estrategia para abrir brecha. Todo estaba yendo viento en popa... Pero Mourinho y sus equipos tienen más vidas que un gato. Primero Alli tras un regalito y luego Kane sacando su fusil a pasear para sellar el pase a los octavos de final. Sin jugar a nada, el Tottenham de Mou comienza ganándolo todo. 

El Olympiacos mereció más

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El plan estaba ideado y bien ideado por el Olympiacos. Los equipos del luso no acostumbran a ser grandes amigos de la posesión, aunque, a decir verdad, mejor no tenerla que tenerla por tenerla. Así, el Olympiacos se lo creyó e hizo suyo el esférico en un inicio que dejó Londres congelado.

Los griegos fueron a hacer saltar por los aires todos los pronósticos. ¿Para qué quedarse atrás? Cuántas veces habremos visto a los más pequeños echarse atrás para nada. El Olympiacos se fue hacia arriba y pronto encontró el camino del áexito con un zurdazo de El Arabi en el que Gazzaniga pudo hacer algo más. 0-1 y a seguir.

Los griegos sabían a lo que jugaban ante un Tottenham al que le costaba un mundo poder salir con pelota jugada. Los mediapuntas estaban muy lejos de Dier, una isla cuya mejor virtud no es precisamente limpiar la salida de balón. Así, los 'spurs' no pusieron en aprietos a José Sá más allá de alguna falta lateral.

El Olympicos, en cambio, sí sabía hacer daño y abrió brecha en un saque de esquina. Mourinho se desgañitaba... Hasta que perdió la paciencia y dio entrada a Eriksen por Dier. Con el danés, el equipo 'spur' gozó de una mejor salida de balón pero aun así les costaba un mundo. 

Un regalo antes de Navidades

Se notaba que faltaba trabajo con el nuevo técnico, así que había que apelar a lo que se podía. El descanso iba a hacer daño al Tottenham por el resultado, así que Meriah le hizo un 'regalito' antes de Navidades para que Dele Alli (sí, no fue su hermano como dijo Mou días atrás) recortara distancias. 

En la reanudación, el conjunto inglés continuó sin jugar a nada pero la pegada, por muy mal que juegues, sigue estando ahí. Primero fue Kane el que remató una jugada pícara del Tottenham tras un saque de banda y luego fue Aurier el que culminaba la remontada con un cañonazo en el área. El Olympiacos continuó jugando a lo suyo y buscando el empate. No obstante, lo único que iba a llegar iba a ser un nuevo tanto de Kane para cerrar el partido.